Opinión

El sentido de las encuestas

Las encuestas publicadas estos últimos días por diferentes periódicos españoles proponen una caída espectacular de los dos grandes partidos tradicionales en beneficio de la nueva generación de formaciones que encarnan Ciudadanos y Podemos. La última, que ha confeccionado Metroscopia para el diario “El País” y que ha aparecido en sus páginas este fin de semana, es particularmente severa con el PP y el PSOE, a los que relega al tercer y cuarto lugar respectivamente tras cosechar los peores resultados de su historia. Este estudio demoscópico expresa que, si las elecciones generales se produjeran hoy, la victoria sería para Ciudadanos con casi un 30 por ciento de los sufragios mientras Podemos obtendría el segundo puesto. Ni la formación morada que se estudia bajo su condición de Unidos Podemos (19’8), ni el PP (19’5) en tercera posición, ni el PSOE (19’0) en cuarto puesto, superarían el 20 por ciento, y los tres estarían por tanto en un puño compartiendo desmembramiento. Hay de todos modos en este estudio un hecho muy significativo. Los tres partidos consignados en segundo, tercero y cuarto puesto pierden votos y solo Ciudadanos los aumenta. Lo hace en condiciones muy llamativas. Tan llamativas que en verdad cuesta mucho trabajo creerse un ascenso tan contundente y sus líderes son los primeros en tomarlo con una muy razonada prudencia que los honra. Cuando los resultados son tan elocuentes y predicen un futuro a tan largo plazo, lo mejor es tomarse las cosas con mucha cautela.

Las encuestas tienen por tanto su trastienda y parece lo más aconsejable servirse de ellas simplemente para ir averiguando la aparición de determinadas tendencias. Las de ahora reflejan la paulatina pérdida de favor del bipartidismo tradicional, la vieja fórmula casi inconmovible de la política española en siglo y medio -interrumpida como cualquier otra cosa en la vida política nacional por una dictadura de casi medio siglo- que parece haber cumplido largamente y puede dar paso a otros protagonistas. La formación de Rivera se fortalece, progresa y crece en unas condiciones muy cómodas porque no ha sufrido desgaste alguno porque no gobierna y ha ido creciendo en función de su influencia. Podemos se estanca, al PP ofrece muestras de gran agotamiento y el PSOE es víctima de la incompetencia de sus dirigentes.

De todos modos, tanta encuesta no es buena y no hace otra cosa que desestabilizar y deslegitimar lo que está en vigor. Personalmente creo poco en las encuestas y menos, si juzgan comportamientos que quedan tan lejos.

Te puede interesar