Al exmagistrado Luís Villares y ahora líder de En Marea le acaban de tocar la cara por reclamar secretaria, chófer y compensación por la pasta que dejó de percibir para darse una panzada de kilómetros durante la campaña electoral. Él, que daría la "vida" por Galicia si fuese necesario, según declaró en la sesión constitutiva de la Décima Lexislatura, se acaba de enfangar hasta la calva en la ciénaga política por bisoñez parlamentaria. Chaval, que eso no se pide por escrito, como te diría cualquier diputado del PP, del PSOE o del BNG si le pides consejo.
Lleva razón el secretario general del PP, Miguel Tellado, cuando le aconseja guardaespaldas en vez de chófer porque los suyos, o algunos de los suyos, no son mejores que los otros que critica e incluso, por experiencia de este chófer de anécdotas, son bastante menos de fiar porque te pueden apuñalar después de haberlos sacado del fango aunque al final acaben hundiéndose sin ayuda. Es lo que hay. Bienvenido a la política, señor juez, y esperemos que tenga tanta paciencia como Rajoy en el Gobierno para liderar la oposición en Galicia.
Aunque toga y política casi nunca maridan bien, en una entrevista durante la pasada campaña electoral, Luís Villares se mostró como un candidato sólido. En el acto central de En Marea celebrado en Ourense consiguió eclipsar el discurso de Beiras con una oratoria fresca después de pagar la novatada en el debate en la televisión pública.
Se trata de un tipo válido con mucha carretera por delante. El mismo día que se filtró a los medios una petición comprensible –aunque más propia de un juez que de un político, para hacer su trabajo y armar un partido que está naciendo por todo el territorio gallego–, Mahou envió un escrito para que la confluencia prescinda de su logo por similitudes con el de la empresa cervecera. También es mala suerte, porque ya se sabe que aquí somos bastante más de Estrella Galicia y con razón. No hay color ni sabor.
Ayer mismo, uno de los padres fundadores de En Marea criticó bajo secreto periodístico la solicitud del exmagistrado y es una verdadera lástima porque se trata de un tipo que puede dar mucho y que, como sucedió en otras ocasiones, se puede cansar a la primera. ¿Una birra?
