Cinco encapuchados agredieron a un matrimonio de octogenarios tras maniatarlos en su vivienda de O Mosqueiro, en el municipio de Vilar de Santos. Los delincuentes causaron cuantiosos daños en la vivienda (destrozaron muebles, puertas, persianas y electrodomésticos) buscando dinero y joyas. Se dieron a la fuga en un turismo, al que plantaron fuego en el municipio de Trasmiras.
El asalto se produjo poco después de las ocho de la tarde del pasado lunes cuando el matrimonio cerró las puertas de su vivienda una vez que varios trabajadores dieron por concluida su jornada laboral en la empresa agrícola que regenta una hija suya, situada en la misma parcela de la casa. A la nave industrial se accede por el mismo portalón que a la vivienda.
El matrimonio se disponía a hacer la cena, cuando escuchó el timbre de la puerta. "Abrí pensando que era algún trabajador al que se le había olvidado alguna llave", aseguró una de las víctimas. Nada más retirar el cerrojo, los cinco encapuchados irrumpieron en la casa. “Solo decían, el dinero, el dinero. Tenían el rostro completamente cubierto, solo se le veían los ojos", añadió la víctima.
Lo ladrones lo primero que hicieron fue golpear al matrimonio (le ocasionaron heridas y diversos hematomas) y después atarlos con bridas. Comenzaron por el varón para continuar con la mujer, terminando por atarlos a los dos juntos, sin posibilidad de que se movieran para pedir auxilio.
Una vez inmovilizado el matrimonio, los encapuchados comenzaron a buscar durante horas dinero por el inmueble y la nave industrial de su hija. "Causaron cuantiosos daños. "Hay que cambiar las puertas y los armarios porque rompieron todo", lamenta el matrimonio, recordando que no tenían dinero en casa.
Los delincuentes, tras apoderarse de dinero y joyas (el botín está pendiente de valorar), pidieron al matrimonio que le abriera el portalón de entrada, dándose a la fuga en el coche de uno de los trabajadores que tenían las llaves en el contacto.
"Actuaron con mucha violencia y nadie se imagina el miedo que pasamos"
El matrimonio disfruta en la actualidad de su jubilación después de regentar una conocida empresa en la comarca de A Limia. Ayer insistían en que solamente quería pasar página, quedar en el anonimato. "Actuaron con mucha violencia y nadie se imagina el miedo que pasamos", recuerda la mujer entre sollozos.
Varios trabajadores reponían en la tarde de ayer parte de los desperfectos que ocasionaron los cinco encapuchados, que abandonaron la vivienda dejando al matrimonio atado. En la zona apenas hay vecinos. La familia más cercana reside a unos 100 metros. El matrimonio se arrastró con las bridas hasta una ventana, desde la que logró pedir auxilio. "Estuvimos gritando más de un cuarto de hora hasta que el vecino nos respondió", añaden.
Tras ayudarles a deshacerse de las bridas, alertaron a la Guardia Civil, que acudió de inmediato al lugar. La vivienda y nave industrial está dotada de sistemas de vigilancia. Los agentes revisaron la grabaciones, en las que comprobaron que los delincuentes accedieron a la casa por la parte posterior después de saltar y cortar un verja.
Los agentes mantienen una investigación abierta y trabajan con la hipótesis de que los encapuchados residen en la comarca y conocían que el matrimonio estaba solo en la vivienda. Los investigadores hallaron el turismo con que se fugaron calcinado en Trasmiras.
