AGRICULTURA

El exceso de lluvia retrasa en A Limia la siembra de cereal de primavera

Los productores de patata piden una "intervención inmediata" en las zonas encharcadas

A la problemática de la merma de la cosecha de cereal de invierno a causa de las inundaciones sufridas en las últimos meses en la comarca, hay que sumarle ahora la imposibilidad de sembrar grano de primavera. Estos trabajos tendrían que estar desarrollándose en el transcurso de la presente semana, según señaló el presidente de la Indicación Xeográfica Protexida (IXP), Guillermo Budiño, quien añadió además que "los peores daños para el sector están por llegar". "De esta clase de trigo se siembran más hectáreas que del de invierno, pero es imposible entrar a las tierras, está todo paralizado", explicó Budiño. "Si dejase de llover en un plazo de 15 días podrían empezarse a trabajar, pero las previsiones climatológicas no dejan entrever esa posibilidad", añadió.

Según los expertos, de hacerse la siembra ahora podría recolectarse durante el próximo mes de julio pero, al tener que retrasarse, la cosecha se efectuaría en agosto. "Durante los meses de julio y agosto no es probable que llueva, y el cereal necesita de agua para florecer", apunta el presidente de la IXP. "Esto ocasionaría el defecto del conocido asurado: el grano no se desarrolla bien, queda esmirriado y sin calidad, y no proporciona harina", añade.

Las adversidades climatológicas también retrasarían la siembra de tubérculo en la capital limiana -en estos momentos tendrían que estar preparándose las parcelas de cara a esta tarea- y el consecuente perjuicio en la producción. "Si se iniciase la plantación el día 15 de mayo, sería maravilloso, no habría problema alguno", explica Budiño. La cuestión es que, de seguir lloviendo, habría que posponerla y sería algo negativo. Si no cambia la tendencia, va a ser un tema muy preocupante", añade.

En este sentido y, desde la Indicación Xeográfica Protexida, aseguran que la campaña de 2017 fue muy buena y sin "podredumbres", ya que el tubérculo se sembró a tiempo y entró en los almacenes con el ciclo cumplido. "Si se hubieran dado retrasos habría que quemarla para poder cogerla y ahí vendrían los problemas de podredumbre", matiza.

Desde la IXP anuncian que la campaña de venta de tubérculo concluirá en las próximas semanas con 1,5 millones más de unidades comercializadas.

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