El proyecto contemplará plataformas elevadas sobre el vial a la altura de O Pombal y Praza Maior
La reforma de la principal entrada a Xinzo, a través de la rotonda de la N525 y la vía de enlace a la A52 -tramo urbano de la carretera nacional o avenida de Ourense- podría ser una realidad a finales del próximo 2022. Al menos, este es el plazo que se maneja desde el Consistorio limiano. Tras el compromiso adquirido por el delegado del Gobierno, José Miñones, en su visita a la localidad a comienzos del pasado mes de septiembre para que el Ministerio de Transportes y Movilidad asumiese el acondicionamiento de dicho vial -antiguo Fomento-, se están dando pasos en firme para materializar dicha intención.
A comienzos de la pasada semana se produjo una reunión de la que formaron parte los arquitectos municipales de Xinzo, la alcaldesa de Xinzo, Elvira Lama; el concejal de Obras, Ramón Gómez Salgado; el edil de Infraestructuras, Rafael Penabad; ingenieros de la Demarcación de carreteras, así como responsables de la redacción del proyecto y un representante de Viaqua. En dicho encuentro se planteó el proyecto de trazado previo al de obra, que se espera licitar el próximo 2022.
Entre otros aspectos se puso encima de la mesa la creación de un carril bici -ya anunciado con anterioridad, aunque no la ubicación, que será en el margen de la gasolinera por una cuestión de seguridad, así como su condición bidireccional- entre la rotonda de acceso a la avenida de Celanova y los institutos. En la reunión también se planteó la unión de este nuevo carril bici, con el que llegará hasta las instalaciones deportivas de A Moreira.
Por otro lado, el futuro proyecto, que incluirá un refuerzo del firme en todo el tramo urbano, también contemplará plataformas elevadas sobre el vial frente al parque de O Pombal y a la praza Maior para ganar mayor seguridad viaria. Se trata de dar prioridad al peatón, así como de forzar al cumplimiento de los límites de velocidad -30 kilómetros por hora-. Esta primacía para los viandantes se completará con el acondicionamiento de aceras más anchas. Además, en la línea de ganar seguridad viaria se reforzará la señalización vertical próxima a los pasos de peatones, que también se quieren elevar.
Por último -y de ahí la representación de Viaqua en la reunión de trabajo- se contemplará en el proyecto una renovación de los servicios: saneamiento, abastecimiento y red de alcantarillado, así como la adecuación de dos rotondas.
Para la redacción de este proyecto inicial se maneja un periodo de dos meses que, tras el consenso entre el Ministerio y el Gobierno local de Xinzo, será la antesala a la redacción del proyecto definitivo que se espera poder licitar a término de 2022. “Esta obra la necesitaba Xinzo desde hace muchos años”, dijo Ramón Gómez Salgado.
