A LIMIA

Una jornada con la Guardia Civil de Tráfico: objetivo, cero sanciones

Efectivos de la Guardia Civil de Tráfico de Verín se encuentran inmersos en un programa especial de control de velocidad. A pesar de que las infracciones no se cometen a velocidades "excesivas" el objetivo es "cero sanciones" 

Son las 10,00 horas de la mañana y el teniente Nogueiras, jefe del servicio de Tráfico en el Destacamento de Verín, organiza a sus agentes para abordar un nuevo día de trabajo dentro de la campaña especial de control de velocidad promovida por la DGT.

El punto de encuentro es la Estación Antela de Xinzo, y el de inicio de la vigilancia parte del kilómetro 193 en sentido decreciente hacia Benavente. El ámbito de actuación será el límite de Sandiás con Allariz hasta la frontera provincial con Zamora. "En un primer momento haremos un control en dinámico -el vehículo que interviene en el operativo va en marcha- en una autovía y, acto seguido, pasaremos a una carretera nacional en donde se hará un control específico por señalización. Estas últimas vías son las que más siniestralidad soportan", explica el teniente. "A través de los medios de comunicación y paneles alfanuméricos se informa a los conductores de la realización de esta campaña", añade. El agente matiza que el objetivo de Tráfico con este tipo de controles y las sanciones que puedan acarrear, no es otro que el de "corregir, administrativamente, los excesos de velocidad, pues son conductas que pueden poner en riesgo la seguridad de los que sí respetan la normativa".

TAMAGUELOS (VERÍN) 19/04/2018.- Patrullando con la Guardia Civil de Tráfico de Verín, EN LA a-52. Detención vehículo robado y positivo test drogas. José PazEn el operativo participan cuatro agentes, habiendo "fuerzas en reserva" por si se produjera un incidente que requiriese de atención inmediata. El guardia civil encargado de operar el radar o "cinemómetro" selecciona el modo "Tacom" para operar en dinámico. El aparato sólo reflejará la velocidad de los vehículos que le rebasen por la izquierda, y estará sujeto a pequeñas variaciones y oscilaciones de velocidad que podrían dejar de captar una velocidad que infrinja la normativa vial. "El coche radar debe mantener una velocidad continua", explica el guardia, que prefiere preservar su intimidad. "Hay un campo de acción al que también es sensible el dispositivo. Si hay baches o sobresaltos no se registra la velocidad y, por lo tanto, no hay foto", añade.

La mañana es tranquila, y en el trayecto hasta Zamora no se produce ningún incidente. "La gente está más concienciada y las velocidades no son muy excesivas", puntualiza el agente. A la vuelta, el cinemómetro detecta la primera infracción: 136 kilómetros por hora y 100 euros de multa. A pesar de que no se pueden sobrepasar los 120 kilómetros por hora, el radar en movimiento deja un margen de error de 12.

Más suerte tiene el conductor de un Nissan GT de alta gama, que acelera a su paso por el radar móvil. El dispositivo no logra captar los kilómetros por hora a los que circula debido a las oscilaciones de velocidad en ambos vehículos."No hay foto, pero sería conveniente pararlo", emite el agente a través del canal de comunicación. "Hay que comprobar si lleva un inhibidor o un detector de radares. Algunos están muy bien hechos y resulta difícil localizarlos pero, de hacerlo, la sanción podría superar los 6.000 euros", matiza el guardia. Finalmente el joven conductor continúa su trayecto.

La unidad se desplaza hasta el término de Tamaguelos -Verín- en donde otro joven de nacionalidad portuguesa es trasladado a la comisaría para esclarecer la titularidad de su vehículo, por llevar las ruedas desgastadas y dar positivo en drogas. Posteriormente quedó en libertad.

TAMAGUELOS (VERÍN) 19/04/2018.- Patrullando con la Guardia Civil de Tráfico de Verín, EN LA a-52. José Paz

Te puede interesar