Corrían los comienzos del año 2006 cuando una jovencísima Agrupación Musical da Limia ofrecía su primer concierto en el salón de actos de la Casa de la Cultura de Xinzo.
La decadencia de la banda municipal de la villa llevó a un grupo de jóvenes a tratar de reflotarla desde otra perspectiva, pensando en un nuevo concepto mucho más moderno que incrementase el gusto y la pasión por la música. "Queriamos innovar, facer unha cousa un pouco máis chamativa para que a xente nova se motivase. Digamos que ao non ter onde tocar a xente acababa as súas formacións musicais e deixábado", recuerda Daniel López, uno de los promotores de la Agrupación Musical da Limia. "Intentamos darlle continuidade a unha banda que estaba morrendo, cunha visión e imaxe máis modernas", añade.
El proyecto funcionó y se diversificó en una Agrupación Musical o Banda Principal, con 76 integrantes; la Banda Infantil, con 42; la Orquesta de Cuerda, que va camino de convertirse en la Orquesta Ourensanía; la Coral Santa Mariña y el Coro Infantil, con 30 niños. Todas estas iniciativas se gestionan desde la Escuela Musical de A Limia, registrada como tal hace cinco años -después de reestructurar administrativamente la entidad, que incluso llegó a perder el apoyo municipal- y uno de los tres centros de Ourense con código educativo junto a Ribadavia y Celanova. En total, la Agrupación cuenta con 202 integrantes desde los 3 años hasta los 78, y 14 profesores. "Nos dedicamos a la formación elemental de personas para integrarlas en nuestros conjuntos instrumentales y vocales", puntualiza José Luis Tielas, director de la escuela y de las formaciones colectivas.
Un periodo difícil
Como en el caso de todas las agrupaciones musicales y actividades culturales, la pandemia ha golpeado duramente a la Agrupación, que lucha por subsistir prácticamente sin ayudas en este sentido. "Al salir del primer confinamiento, en junio, fuimos la primera banda de España que dimos un concierto y nunca tuvimos ningún problema derivado del covid", cuenta Tielas.
Actualmente, las clases las imparten vía "online" debido a la situación epidemiológica: "Nos compramos una cuenta de Zoom y prácticamente nos gastamos todo el dinero en la adaptación, geles, y demás", explica el director, que pide más ayudas para este tipo de agrupaciones y asociaciones musicales. Coger fuerzas en estos momentos es más fácil para los músicos de A Limia si echan la vista atrás y recuerdan todo lo conseguido, como el Certamen Gallego de Bandas a la mejor banda musical en 2018. "Ganamos bastante prestigio, incluso participamos en certámenes internacionales como el de Benavente", recuerda Tielas. "Lo importante es que los alumnos aprenden valores como el respeto, la amistad y la disciplina. La gente más mayor, además, disfruta un montón en clase, es un aliciente", añade. Es el caso de Antonio Salgado, de 69 años, que encontró en la Agrupación la mayor motivación de su día a día: "Ás veces, cando estou máis baixo de moral, a miña muller anímame a que vaia a ensaiar e cando volvo no coche xa veño cantando", dice Antonio. "A Agrupación é unha maravilla", añade.
En cuanto la situación lo permita, los músicos celebrarán una cena y un concierto para soplar los 15.
