El regidor de Vilar de Barrio, Manuel Conde, pedirá cooperación institucional con el objetivo de mantener activo el servicio de ayuda en el hogar del Concello tras decretarse un brote de covid-19. Conde explicó que, con motivo de la situación que se vive actualmente, cuatro trabajadoras de este servicio permanecen aisladas -una arrojó un resultado positivo en las pruebas PCR- y las restantes siete se han quedado prácticamente sin trabajo. "So nos quedan agora mesmo oito usuarios. O resto, 41, déronse de baixa temporalmente por medo da circunstancia", relató el regidor de Vilar de Barrio.
Este servicio de ayuda a domicilio se sufraga, por un lado, por parte de la Xunta de Galicia, que aporta el coste de las trabajadoras. Los usuarios, por su parte, dan una pequeña cuantía económica en función de sus ingresos. "O que ocorre é que se non se presta o servizo a Xunta de Galicia non paga. Por este motivo quería trasladar, inicialmente, á Deputación de Ourense esta situación. Pediremos que nos boten unha man, xa que se trata dunha cuestión que, agardamos, nuns 15 días estea solventada", aseguró el alcalde nacionalista.
Sobre el estado del rebrote de Vilar de Barrio, el regidor se muestra esperanzado. "Falei con todos os pacientes que deron positivo e están ben. Os nonaxenarios evolucionan, en principio, favorablemente".
