La ampliación de la depuradora de Allariz costará 1,5 millones de euros

El Concello de Allariz liderará este año el proyecto para llevar a cabo la mejora de la estación depuradora de aguas residuales (EDAR), ubicada en la carretera de Celanova. La infraestructura, que data de los años 90 del siglo pasado y que fue diseñada con capacidad para 7.500 habitantes, se ha quedado obsoleta para las nuevas necesidades del municipio, con 6.245 habitantes según el Instituto Nacional de Estadística y un flujo de visitantes en constante crecimiento, y con un compromiso municipal con la preservación del medio ambiente. La propuesta que el grupo de gobierno nacionalista ya ha puesto encima de la mesa, tanto de los responsables de Augas de Galicia como de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, pasa por la ampliación de la capacidad de la EDAR "de 7.500 a 20.000 habitantes, garantizando o seu correcto funcionamento todos os meses do ano", subraya la alcaldesa, Cristina Cid, quien cifra la inversión en 1,5 millones de euros La instalación actual, explican desde el grupo de gobierno, está "desbordada" en determinadas épocas del año, especialmente en verano, "o que nos fai estar en alerta permanente". Las limitaciones de la depuradora provocan que, durante la temporada estival, tampoco se pueda programar la depuración de las fosas sépticas. "Hai temporadas nas que a depuradora está traballando as 24 horas ao día, por non falar da carencia dun tanque de tormentas". Hace años que el Concello de Allariz viene solicitando la dotación de esta infraestructura, que permitiría almacenar el agua de lluvia, especialmente los días de fuertes tormentas, y una doble función al hacer de predepuración de esas aguas. "Calquera fallo ten a súa consecuencia no río, polo que sempre nos fai estar con medo", insiste la alcaldesa. El proyecto, de cuya redacción se encargará el Concello, incluye la renovación de los nuevos equipos, "os existentes quedaron obsoletos e agora hai una tecnoloxía superior", apuntan desde el Consistorio. Cofinanciación El Concello, que ya cuenta con una memoria valorada y solicitará ahora a la empresa concesionaria que detalle las mejoras, confía en poder entregar el proyecto a Augas de Galicia en el segundo semestre de este año 2021, de cara a su ejecución en 2022. En próximas fechas, Cristina Cid espera mantener una reunión "a tres" para fijar los compromisos y el porcentaje de financiación de cada una de las partes. La opción propuesta por el grupo de gobierno municipal contempla la cofinanciación al 50% de los dos organismos públicos, "e o Concello sería o encargado de poñer a disposición os terreos, ademáis de asumir o custo da redacción do proxecto", dijo la alcaldesa del BNG. Tras la primera toma de contacto, que permitió exponer las intenciones del grupo de gobierno, la impresión de la alcaldesa es que "a disposición é boa", comentó, pendiente aún de una reunión con la responsable de Infraestruturas e Mobilidade.