Dos empresas completan la "economía circular" del boi

Cinco negocios, además del Concello y la hostelería, hacen posible la venta de carne 100% alaricana

A las puertas de la celebración de las "IX Xornadas de Carne de Boi", previstas del 25 de septiembre al 12 de octubre, Allariz presume del éxito del proyecto municipal de cría de carne de buey, puesto en marcha en 2011, con la incorporación de una nueva explotación ganadera a la cría de ejemplares y la creación de una empresa, Briugu Allariz, dedicada a la distribución y venta de la carne.

Ya son cinco los negocios implicados en sacar al mercado un producto 100% alaricano, sostenible y de calidad, destaca la concejala de Promoción Económica, María López, quien pone el acento en la importancia de crear empleo en el sector primario, a la vez que se ofrece un producto de primer nivel a la hostelería local, no solo durante las jornadas, sino todo el año con la comercialización del producto del que ahora se encarga una nueva empresa liderada por el alaricano Xosé Romero. "Este é un exemplo da posta en valor dos produtos locais e de quilómetro cero", señala López.

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La iniciativa municipal arrancó con la cría en extensivo de los animales en Penamá, fruto de un convenio de colaboración con la comunidad de montes, y se ha ido afianzando y consolidando como un proyecto colaborativo de economía circular que este año sumaba también una nueva explotación al proceso de engorde de los animales (A Arca dos Casares) al trabajo que ya desarrollaba O Rego, en Coedo). "Cando arrancamos estabamos convencidos de que o aproveitamento da nosa historia, neste caso o boi, coa recuperación das superficies agrarias e forestais abandonadas podía incidir na economía local e así foi. Que a carne se venda en Allariz crea valor engadido na hostalería e no pobo", dijo la alcaldesa, Cristina Cid. 

Para este año, en Allariz disponían de 23 ejemplares, de los que finalmente la empresa J.N. Requeno ha llevado a cabo desde junio el sacrificio y transformación de cuatro animales para las jornadas y ocho para la venta directa a la hostelería y al resto de la clientela local y visitante desde el Mercado da Reserva da Biosfera.

Con tapas, pero sin concurso

Un total de 23 establecimientos ofertarán desde este viernes 22 tapas y elaboraciones diferentes con diferentes partes del buey. La necesidad de adaptarse a los protocolos covid-19 y evitar las aglomeraciones ha llevado a la organización a suspender el concurso de tapas, pero no así la degustación de esta exhibición de alta cocina en miniatura, que se completará con una carta donde no faltarán los tradicionales chuletones, solomillos, churrascos, hamburguesas, estofados, potajes, croquetas,  empanadillas, pizza o tartar de buey. Los precios, al igual que las propuestas, abarcan un amplio rango apto para todos los bolsillos, desde los dos euros de la tapa a los 70 euros el kilo del chuletón. Para esta edición se han sacrificado cuatro ejemplares (dos menos que en 2019) ante la previsible disminución de la participación por el coronavirus. No obstante, los hosteleros consultados se mostraban confiados en el éxito de esta nueva jornada "porque hai xente moi fan do boi", comentaban.

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