La zona termal y el yacimiento militar romano no se podrán visitar en esta Semana Santa
Ocurre cada año, pero en esta ocasión se han hecho más evidentes, si cabe, los perjuicios que provoca la subida del nivel del embalse de As Conchas a los recursos turísticos de Bande. En unas semanas, el agua ha cubierto por completo la zona termal de Os Baños, así como el yacimiento militar romano Aquis Querquennis, ubicado en el núcleo de Porto Quintela, obligando a suspender una visita teatralizada prevista para este mismo fin de semana.
"É algo lóxico que ocorre todos os anos. Mesmo este 2018 foi excepcional porque a seca nos permitiu gozar algo máis da zona, dado o baixo nivel do encoro", comentaba el alcalde, José Antonio Armada, quien asegura que lo habitual es que el agua cubra las termas y el yacimiento desde principios de año hasta agosto.
Las explicaciones de las autoridades locales son recibidas de manera dispar por vecinos y usuarios de las termas y del propio campamento, si bien las personas consultadas ayer lamentaban como, a las puertas de Semana Santa, Bande tenga que renunciar a dos de sus atractivos turísticos.
Esta variación del caudal de As Conchas es una de las razones de peso que llevó al Concello de Bande a desarrollar un arduo y complejo expediente para lograr la declaración de aguas minero-medicinales y, con ella, la potestad para su explotación "e poder levar as termas fóra da zona de anegación, para o seu uso e desfrute todo o ano", explicaba Armada.
En la actualidad, el Concello no tiene permiso para actuar sobre el manantial, de ahí que en estos años las obras que se han llevado a cabo en esta zona de dominio público hidráulico se hayan centrado en el entorno y nunca sobre el caudal. "Sen a declaración, o Concello non pode intervir nos mananciais, pero si que foi unha prioridade para nós mellorar as pozas e a súa accesibilidade para, na medida que o encoro o permita, todos os veciños e visitantes poidan gozar da zona", dijo.
Preservar el uso público
Hace años que el grupo de gobierno liderado por Armada inició el proceso para hacerse con la titularidad de las aguas. En estos momentos, tal y como explicó el regidor 'popular', se está a la espera de la firma de sendos convenios con la Xunta y la Deputación de Ourense, para lograr los 150.000 euros que, según los cálculos municipales, cuestan los trabajos necesarios para conseguir la declaración.
"O tema do financiamento está bastante encamiñado e, unha vez que estea resolto, comezaremos coa creación das infraestruturas necesarias para lograr a declaración", confirmó Armada.
Fuentes municipales han explicado en varias ocasiones que se requieren analíticas mensuales a lo largo de todo un año para validar la declaración. Pasado ese tiempo, y de superar los requisitos, el Concello tendría la obligación de presentar un proyecto de explotación de las aguas. "Quizás convoquemos un concurso de ideas, pero sempre preservando o uso público", concluía Armada.
