La construcción de un nuevo centro de salud en Muíños dará luz verde al Concello para convertir el actual inmueble de la calle Val do Salas en un edificio residencial. “Hai demanda de aluguer. A oferta pública, e tamén a privada, está completa, a maioría de traballadoras da residencia. Un negocio chama a outro”, reconoce el alcalde, Plácido Álvarez, que actualmente cuenta con dos pisos públicos en alquiler, en la primera planta del centro médico. “O obxectivo é preparar dous apartamentos no baixo cuberta e, unha vez que a planta principal quede baleira, facer un ou dous máis, segundo digan os técnicos”, comenta Álvarez.
La comarca cuenta actualmente con 15 viviendas municipales para su alquiler social, de las cuales 12 están actualmente ocupadas por personas que viven solas, matrimonios o familias con hijos, con precios que van desde los 50 euros en Entrimo, 80 euros en Bande y 240 euros en Muíños. Según datos municipales, la previsión pasa por rehabilitar y crear seis más. En Entrimo, el Concello está llevando a cabo la reforma de tres de las siete viviendas municipales, dos de ellas ubicadas en el grupo escolar Santa María A Real y la tercera, en la primera planta del antiguo centro de salud. La actuación, que cuenta con un presupuesto de unos 30.000 euros por vivienda costeado con una subvención bianual de la Xunta, incluye la reforma del baño y la cocina, también mejoras en la tarima y pintado de las mesas en el interior. “Son tres viviendas que estaban vacías. Las otras cuatro que tenemos están ocupadas”, explica el regidor socialista, Ramón Alonso, quien reconocía que los planes del grupo de gobierno pasan por reformarlas también. “A veces nos encontramos con las dificultades de las familias de optar a una vivienda en alquiler, porque la gente es reacia a poner su casa en el mercado”, matiza Ramón Alonso, quien califica de simbólico el precio de 50 euros mensuales, y las nuevas “van a seguir en esa línea”.
Ordenanza a punto
El Concello de Lobios acaba de finalizar las obras de reforma de uno de los aularios ubicado en el lateral del edificio multiusos. Dos viviendas de uno y dos dormitorios que próximamente se sacarán al mercado en régimen de alquiler. “Agora mesmo estamos coa redacción da ordenanza, van ter un prezo moi axustado”, traslada la alcaldesa, Mari Carmen Yáñez, quien reitera la intención del gobierno local para poner a disposición de las familias viviendas a precios asequibles “dadas as dificultades que hai no municipio para acadar vivendas adaptadas ás necesidades das familias con poucos recursos”. Las de Cruces son las dos primeras viviendas municipales, pero Yáñez confirma que “a idea é continuar nesa liña e xa estamos traballando niso”.
A finales del año pasado, y tras dos expedientes, Bande adjudicó las seis viviendas rehabilitadas en las antiguas casas de los maestros a otras tantas familias, favorenciendo la fijación de población adulta e infantil. De cara al próximo año y, en función de la demanda, retomarán el proyecto para arreglar la casa del conserje. “Coa adxudicación destas seis, constatamos que non había a demanda que esperabamos, por iso este ano non afrontamos a reforma da do conserxe, pero intentarase arranxar en próximas convocatorias”, traslada Sandra Quintas, quien apunta que hay interés por asentarse en Bande “pero a xente busca casas con finca”.
En Lobeira, el regidor, Antonio Iglesias, asegura que, de momento, la demanda privada cubre las necesidades puntuales de alquiler. “Nós non temos ningún inmoble para destinar a vivenda, habería que compralo”, concluía.
