Los agentes buscan a un varón de unos 40 años, de mediana estatura y pelo negro.
El atracador que se apoderó el pasado día 4 de enero de 5.000 euros en la oficina bancaria de la localidad de As Conchas (Lobeira) tras intimidar a la empleada y a un cliente con una pistola, se esfumó sin dejar rastro.
La Guardia Civil revisó las cámaras de vigilancia de la sucursal bancaria, pero las imágenes, según pudo saber este periódico, no arrojan luz en la investigación que hay abierta para localizarlo y proceder a su detención. Los agentes, que trabajan en colaboración con la policía portuguesa ante la sospecha que se fugó al país vecino, intensificaron la vigilancia en la comarca de A Baixa Limia al no descartar un nuevo atraco. El último de los controles fue establecido durante buena parte de la jornada de ayer a escasa distancia de la entidad financiera, pero las pesquisas no dieron fruto.
Los agentes buscan a un varón de unos 40 años, de mediana estatura y pelo negro.
