Todo músico es consciente de la importancia de la salud de sus oídos para llevar a cabo su actividad profesional pero, ¿conoce realmente los riesgos a los que está expuesto?
La mayor parte de las investigaciones sobre los daños auditivos o hipoacusias inducidas en ámbitos laborales están encaminadas a conocer las consecuencias de largas exposiciones a ruido, definiendo a éste como cualquier sonido desagradable y no deseado. Los músicos profesionales, en cambio, nos deleitan con sonidos agradables a niveles de intensidad equivalentes sin saber que el peligro de una lesión auditiva es el mismo.
Por esta razón, varias alumnas del Centro Integrado de Formación Profesional Ánxel Casal en A Coruña hemos decido realizar un proyecto de investigación en este campo, tomando una pequeña muestra de diez músicos de una banda municipal al que se le realizó un estudio audiométrico completo.
Tras el análisis de los resultados detectamos que tres sujetos, a los que correspondían el mayor número de años dedicados a la música, muestran un defecto auditivo localizado en frecuencias agudas de características muy similares a las lesiones auditivas producidas en trabajadores expuestos a altos niveles de ruido en otros sectores laborales como puede ser, por ejemplo, la construcción.
Queremos destacar que únicamente uno de esos tres pacientes presenta antecedentes personales referidos a una causa externa diferente de la exposición musical que pueda justificar el defecto de audición.
Además de esto, hemos detectado dentro de los pacientes con buena audición, un par de sujetos con un fenómeno llamado hiperacusia, que produce un estrechamiento del campo auditivo refiriendo una sensibilidad excesiva a los sonidos fuertes. Esto se puede traducir como una advertencia temprana de excesiva exposición al ruido.
Por todo esto, queremos hacer un llamamiento a la reflexión sobre el cuidado de la audición en el sector de la música y destacar la necesidad de programas de prevención y concienciación, ya que la hipoacusia inducida por música se puede evitar.
Por esta razón, varias alumnas del Centro Integrado de Formación Profesional Ánxel Casal en A Coruña hemos decido realizar un proyecto de investigación en este campo, tomando una pequeña muestra de diez músicos de una banda municipal al que se le realizó un estudio audiométrico completo.
Tras el análisis de los resultados detectamos que tres sujetos, a los que correspondían el mayor número de años dedicados a la música, muestran un defecto auditivo localizado en frecuencias agudas de características muy similares a las lesiones auditivas producidas en trabajadores expuestos a altos niveles de ruido en otros sectores laborales como puede ser, por ejemplo, la construcción.
Queremos destacar que únicamente uno de esos tres pacientes presenta antecedentes personales referidos a una causa externa diferente de la exposición musical que pueda justificar el defecto de audición.
Además de esto, hemos detectado dentro de los pacientes con buena audición, un par de sujetos con un fenómeno llamado hiperacusia, que produce un estrechamiento del campo auditivo refiriendo una sensibilidad excesiva a los sonidos fuertes. Esto se puede traducir como una advertencia temprana de excesiva exposición al ruido.
Por todo esto, queremos hacer un llamamiento a la reflexión sobre el cuidado de la audición en el sector de la música y destacar la necesidad de programas de prevención y concienciación, ya que la hipoacusia inducida por música se puede evitar.
