Es muy habitual ver en los telediarios noticias acerca de la piratería, tanto en la industria de la música, como en la del cine. Por ello, hay el debate de si los discos o las entradas para el cine tendrían que ser más baratos. En mi opinión, hay otra cosa que tendría que ser comentada, el precio de los libros. Comprar un libro, formato original, implica pagar un precio que ronda los 20 euros, algo que no es muy económico para los tiempos que corren. Aun así, hay alternativas a los libros tamaño estándar, como los libros de bolsillo o los libros electrónicos, también llamados 'e-books'.
Para mí, el formato de las ediciones pequeñas no es muy cómodo, al tener más hojas y la letra más pequeña, aunque sean más baratos. Respecto a los electrónicos, sale más económico, ya que solo hay que comprar el accesorio informático, luego hay muchos libros disponibles en formatos digitales. A pesar de esta opción, creo que para los enamorados de la lectura, entre los que me incluyo, no hay nada como pasar las páginas de papel con la emoción de ver qué pasará, y no tener que darle a una pantalla para descubrirlo. Por todo esto, me gustaría, y pienso que sería favorable, que se bajara, también, el precio de los libros.
