El triángulo del gusto

El triángulo del gusto, o kilómetro Cero del placer gustativo, lo conformaban para mis amigos: La Ibense junto a las pastelería Ramos y Miguel.
De los batidos (me pido el de turrón...) mejor no hablar, ya que me han dejado un vacío dificil de cubrir, aunque sigo intentándolo...Los bollitos de crema de Ramos y Miguel no eran competencia, simplemente eran complementarios. Que Miguel haya enagurado otro establecimiento en la ciudad nos abre una nueva puerta hacia uno de los caprichos más básicos e imprescindibles. Cuando esa crema entra en contacto con mis papilas gustativas, se precipita una cascada de recuerdos y sensaciones imperecederas.

Te puede interesar
Más en Cartas al director