Las agujas del reloj que preside el edificio del mercado celanovés volverán a marcar las horas para los vecinos y visitantes de la plaza Cervantes, popularmente conocida como de As Pitas. Así lo confirmaba ayer el concejal del grupo de gobierno Manuel Nogueiras (Celanova Decide), durante la supervisión de los trabajos que han supuesto la reparación de la maquinaria y la puesta a punto de la esfera que preside el inmueble de 1933.
El Concello de Celanova ha contratado el arreglo de la maquinaria, que data de los años 80 del siglo pasado y que, en los primeros años del XXI, resultó dañada como consecuencia de una descarga eléctrica tras un día de fuerte tormenta. La presencia de una grúa en la fachada principal del edificio llamaba ayer la atención de los transeúntes. La gran mayoría aseguraba desconocer el tiempo que lleva el reloj averiado, algunos hablaban de 16 años, otros de algunos menos, "pero polo menos leva dez anos parado", señalaba el edil de Celanova Decide tras consultar a los más veteranos del lugar.
El proyecto de reparación, presupuestado en 5.500 euros, consiste en la actualización y puesta en marcha del reloj, incluidas labores de eliminación de óxido en las agujas y la carcasa exterior, así como el pintado de las mismas con imprimación y pintura especial. "O reloj nunca tocou as campanas pero agora sí o fara", adelantaba Nogueiras, quien confirmó la instalación de varios altavoces que permitirán que suenen las campanas y se reproduzcan puntualmente melodías y música ambiental. "Falaremos cos veciños, pero a intención é que toquen as horas durante o día. Ademáis, poderanse programar melodías ou música ambiente", comentaba el edil.
Torre das campás
El reloj de la Plaza de Abastos, al igual que el que preside la Torre das Campás, se colocaron al principio de los años 80. Según un informe elaborado por el técnico municipal Antonio Piñeiro, fue intención de la primera corporación democrática incorporar un reloj a la torre monacal, "dado que a maquinaria interior do reloxo histórico do convento había anos que deixara de funcionar, soamente se utilizaban as campás para o uso de chamada ó culto na igrexa", recuerda. Una compra a la que posteriormente se incorporó un segundo reloj para su instalación en la Plaza de Abastos a comienzos del año 1981.
Tal y como sucedió en aquel momento, la intervención actual permitirá dotar de información horaria visual a un mayor número de vecinos de la villa, puesto que la configuración arquitectónica de la Torre das Campás obligó a instalar la esfera en su fachada sur, impidiendo su visionado desde la Praza Maior. A estos dos modernos relojes, hay que añadir la presencia de los cuatro monumentales relojes de sol instalados en el conjunto monacal de San Salvador.
