El Monasterio de San Rosendo albergó la clausura del programa de formación y asesoramiento
El antiguo refectorio del Monasterio de San Rosendo de Celanova fue el escenario escogido para la presentación de los proyectos del segundo espacio "coworking", el programa de formación y asesoramiento para emprendedores desarrollado por la Escuela de Organización Industrial (EOI) y el Igape, con la colaboración del Concello de Celanova.
En los últimos seis meses, diferentes mentores han asesorado y acompañado a emprendedores de Terra de Celanova, A Baixa Limia y A Limia en el desarrollo de 19 iniciativas empresariales (arrancaron 22 pero, por diversas razones, tres renunciaron), que ayer se presentaron ante el público local en la bautizada como "Demo Day", presentada por Carolina Piñeiro, una joven emprendedora local que participó en la primera edición del "coworking".
Haciendo gala de su creatividad, los diferentes participantes fueron exponiendo a través de ponencias y videos los proyectos que pretenden sacar adelante en el territorio. "Se trata de proyectos nuevos que se han ido configurando a lo largo del 'coworking', pero también de negocios que ya estaban en marcha y en donde los mentores nos hemos sentado con ellos y hemos tratado de colaborar", comentaba David Cano, responsable del "coworking" celanovés, que aseguró que "para los mentores no ha sido un programa más, sino que nos han contagiado su grado de implicación. Por eso hoy tenemos esa sensación de que es un día de celebración".
En la inauguración de la jornada, el alcalde celanovés animó a los presentes a quedarse en el rural, "Celanova es un lugar para vivir y para crear", dijo. Por su parte, tanto el director del Igape, Juan Cividanes, como Javier Benito, del EOI, subrayaron la importancia de este programa en el sentido de que apoya al emprendedor y, en consecuencia, genera riqueza en el entorno. "Os quiero agradecer el esfuerzo y os animo a que pongáis en marcha vuestras ideas, ¡lanzaros, arriesgaros!", dijo Cividanes, que avanzó la celebración de un foro de inversión donde participarán los mejores proyectos de todos los "coworking" para facilitarles el acceso a posibles inversores.
Comercio minorista, turismo y patrimonio
Los proyectos que ayer se presentaron en Celanova están relacionados con los sectores de actividad tradicional y comercio minorista, turismo y patrimonio, de contenido social y empresas tecnológicas. "Una gran parte de ellos va a seguir adelante porque son proyectos con un fundamento real, que perfectamente pueden acudir a la siguiente fase de búsqueda de capital", aseguraba Cano. Sobre su experiencia en el "coworking", los participantes coincidieron que el espacio les ha ofrecido las herramientas necesarias para moldear su proyecto empresarial, a la vez que ha servido de trampolín para conocer nuevas iniciativas y posibles colaboradores.
Una vez cerrada la segunda edición, los organizadores ya están trabajando en la tercera con la apertura del plazo de inscripción.
