El colectivo O Bosque Máxico entregaba hace unos días el premio "Ouro Azul" al ingeniero de montes y escritor celanovés, Xosé Benito Reza.
Un reconocimiento a 30 años de dedicación profesional y personal al medio ambiente, a la flora y la fauna del Xurés, a los ríos de estas tierras "arraianas" en las que se pierde, cada vez que su profesión se lo permite.
¿Se esperaba el premio?
¡Para nada! Y me hizo mucha ilusión tanto por la categoría del premio, solo hay que ver los premiados de años anteriores, como por quien lo otorga, que son mi gente del Xurés. Que te den en tu tierra un reconocimiento es un orgullo. Supone un reconocimiento a 30 años de servicio público, aunque yo dejé de trabajar directamente en el Xurés y sobre temas de la naturaleza hace veinte años.
Siempre habla con añoranza y con cariño del Xurés.
Soy un enamorado de la zona y me sigo preocupando por los proyectos que pusimos en marcha o diseñamos durante el tiempo que fui director del parque. Lo que espero es que una vez que pase esta crisis, se vuelvan a retomar los temas pendientes porque tenemos un enorme potencial que nos ofrece un montón de oportunidades de desarrollo, de turismo. Los caminos están hechos, todo está inventado, solo es necesario tener voluntad, formación y echarle imaginación.
¿Dónde habría que hacer mayor hincapié?
La naturaleza está más o menos salvada. El lobo, el águila, la flora y la fauna más representativa está ahí, aunque de vez en cuando se encuentre alguna calamidad como trampas ilegales o los temidos incendios. Lo que falta es pensar y relanzar este territorio para la gente. Ese fue uno de mis objetivos con la creación del parque, esto se hacía para conservar al hombre, que es una de las especies más amenazadas de esta zona.
Pero a la vista de las cifras de despoblación, poco se ha logrado. ¿Es posible frenar esta situación?
Es muy difícil. En Galicia hay 30.000 núcleos de población, es casi imposible frenar esta situación, pero sí mitigarla. Hay que pensar el territorio de otra manera.
¿Qué papel le corresponde jugar a las administraciones y cuál a las empresas y particulares?
Esto es algo de todos. O se mete todo el mundo, o no hacemos nada. De poco sirve que la administración pública tire del carro, si no hay un respaldo, un acompañamiento de la iniciativa privada.
Uno de sus proyectos estrella como director del Xurés fue la aldea de Salgueiros, ¿qué piensa cuando la ve aún hoy abandonada después del dinero invertido?
Es lo que más me duele. Salgueiros es la única aldea propiedad de la Xunta, donde se llevó a cabo un importante proyecto de rehabilitación para poner en marcha la primera aldea ambiental. Yo no voy a criticar a nadie, vino la crisis y estamos como estamos. Ahora bien, hay que mantenerlo y pensar qué destino se le puede dar. A ver si intentamos que, lo que está arreglado, funcione y vayan chavales, monitores, investigadores,... que era para lo que se diseñó.
La Xunta ha anunciado la creación de un jefe de área para el Xurés, ¿qué le parece la medida?
Es interesante porque parece que permitirá recuperar esa figura de director el parque. Personalmente, espero que sirva de intermediario entre la población y la administración para atender las demandas. Estamos ante el mayor parque de Galicia, con un montón de aldeas y a esta gente hay que atenderla porque ellos son los propietarios del parque. Ellos son los que con su manejo y respeto, han mantenido este territorio así hasta nuestros días, y hay que ayudarles para mejorar su calidad de vida. Me parece muy bien que haya una figura de este tipo, pero que tenga capacidad de decisión para atender a los propietarios del parque.
¿Cómo ve el tema de As Conchas?
El Limia es uno de los ríos más maltratados de la Península Ibérica. Ahora, ni es un problema de hoy, ni lo podremos solucionar para mañana. Creo que se han dado los primeros pasos a la hora de reconocer el problema, identificar a los causantes y asumirlo porque son 50 años vertiendo porquería. Sé por la prensa que existe un proyecto, ojalá que se cuente con los mejores expertos y se ponga fin a esta situación porque no hay derecho que en un paraje natural, declarado Reserva de la Biosfera Transfronteriza, tengamos un embalse podrido. Aquí, es el Estado quien tiene que actuar y Ourense debe ser una prioridad y una preferencia, porque al final las cosas se pueden hacer o no, dependiendo del dinero.
Como experto que es en materia antiincendios, los fuegos de cada verano tampoco ayudan
En este tema se mejoró mucho, hay muchos menos incendios que hace 20 años y la eficacia también mejoró, aunque es atroz que cada año haya 1.000 incendios en la provincia. Tenemos gente muy formada y capacitada para combatirlos, pero en esto juega un papel importante la despoblación y la falta de implicación de alguna gente. Estamos gastando mucho dinero en esto y la gente tienen que ser consciente de los efectos del fuego, que arrasa con todo, destruye suelos, erosiona los montes, contamina el agua,... y colaborar. No puede ser que dos tipos nos monten un festival cada verano. Porque estamos hablando que los culpables son gente que vive aquí, no viene nadie de fuera a quemar los montes. Hay que seguir incidiendo en el papel de las fuerzas de seguridad, en la coordinación con otros medios y con Portugal, y trabajar mucho en investigación. n
