La antigua rectoral de San Pedro da Torre reabría ayer sus puertas tras años de clausura y litigios municipales.
Vecinos de Grixó y su capitalidad municipal, Padrenda, acompañados por las autoridades, encabezadas por el alcalde Manuel Pereira y el presidente de la Diputación José Luis Baltar, asistían al acto de inauguración del inmueble reconvertido en casa de turismo rural. 'Estamos encantados de que se poña en marcha, non só por tratarse do primeiro establecimiento hosteleiro do municipio, senón polos beneficios que para os veciños supon contar cun servizo de cafetería e mesón con productos da zona', resaltaba el regidor local durante la inauguración.
El inmueble, que data del siglo XVII, fue vivienda de nobles antes de ser casa rectoral 'y se dice que también fue un fuerte militar aunque estamos a la espera de que la Xunta nos envíe la certificación correspondiente, con fotos antiguas incluidas, que aprovecharemos para montar una exposición sobre la historia local', explicaba Ismael Domínguez que, junto a María Sobera, se han hecho cargo de la concesión municipal. Las instalaciones están emplazadas en una ladera del denominado 'Monte da Torre', donde hay indicios de que antiguamente hubo un castro celta, en un lugar de incalculable valor paisajístico y natural en la frontera con Portugal. 'A través del establecimiento y de la reciente asociación de turismo que hemos creado un grupo de empresarios de la zona, incluida la cercana Castro Leboreiro, promoveremos todo tipo de eventos culturales y sociales con el objetivo de potenciar la zona turísticamente', matizaba Domínguez.
En la actualidad, la casa rectoral es de titularidad municipal tras la firma de una concesión por parte del Obispado. Sus dependencias fueron rehabilitadas a principios de esta década con varios talleres de empleo y subvenciones de la Xunta por un importe de 1,2 millones de euros. 'Daquelas adxudicouse a unha empresa que o destinaba a albergue para nenos e só abría no verán', relataba Pereira.
El inmueble, que data del siglo XVII, fue vivienda de nobles antes de ser casa rectoral 'y se dice que también fue un fuerte militar aunque estamos a la espera de que la Xunta nos envíe la certificación correspondiente, con fotos antiguas incluidas, que aprovecharemos para montar una exposición sobre la historia local', explicaba Ismael Domínguez que, junto a María Sobera, se han hecho cargo de la concesión municipal. Las instalaciones están emplazadas en una ladera del denominado 'Monte da Torre', donde hay indicios de que antiguamente hubo un castro celta, en un lugar de incalculable valor paisajístico y natural en la frontera con Portugal. 'A través del establecimiento y de la reciente asociación de turismo que hemos creado un grupo de empresarios de la zona, incluida la cercana Castro Leboreiro, promoveremos todo tipo de eventos culturales y sociales con el objetivo de potenciar la zona turísticamente', matizaba Domínguez.
En la actualidad, la casa rectoral es de titularidad municipal tras la firma de una concesión por parte del Obispado. Sus dependencias fueron rehabilitadas a principios de esta década con varios talleres de empleo y subvenciones de la Xunta por un importe de 1,2 millones de euros. 'Daquelas adxudicouse a unha empresa que o destinaba a albergue para nenos e só abría no verán', relataba Pereira.
