Víctor Manuel acaba de publicar 'Vivir para cantarlo', un cancionero con más de 400 páginas, en las que incluye las letras de todas sus canciones. El cantautor y productor musical explicó hoy que para llenar todas estas páginas ha recuperado desde sus primeras composiciones hasta las letras de los temas de su próximo disco, que saldrá a la venta en marzo de 2008. Su teoría para seguir componiendo es 'no perder la ilusión' y sobre cantar en directo destacó que 'el aplauso es un veneno, que se necesita como respirar'.
En una entrevista concedida a Europa Press, Víctor Manuel habló de esta 'biografía poética' que publica Temas de Hoy, marcada por temáticas como el amor, la denuncia social o la estima por la tierra, reflejo de sus más de cuarenta años dedicados a la música y a la lucha política. Desde sus inicios en los años 60 hasta sus composiciones más recientes de 2007 están en este libro, que además de temas tan conocidos como 'Sólo pienso en ti' o 'La puerta de Alcalá' incluye 'otras canciones que estaban en el limbo'.
Pese a que Víctor Manuel confesó que le gusta su 'profesión' como compositor, su verdadero oficio es 'escribir las canciones y cantarlas'. 'Los directos son una droga dura y es difícil dejarlos. El aplauso es un veneno, se necesita para respirar', afirmó el creador de clásicos como 'La madre', 'La romería', 'Sube al desván', 'Bailarina' o 'Ay, amor'.
A este respecto recordó las giras en solitario así como las conjuntas, tanto con su mujer Ana Belén, como con otros artistas como Joaquín Sabina o Joan Manuel Serrat (El gusto es nuestro, Mucho más que dos o Dos en la carretera). 'A veces en las giras conjuntas hay incógnitas y te pones en lo peor, pero luego el disfrute ha sido absoluto y nos hemos hecho amigos inseparables', afirmó el músico asturiano.
TANTAS CANCIONES...
Respecto a escribir para otros, confesó que sobre todo lo ha hecho para su mujer y los encargos le gustan menos. 'Me gusta componer para mí y lo que no me sirve a mí, tampoco sirve para los demás. Lo que no me sirve, lo tiro y tengo muy pocos temas no grabados. Y no sé cómo tengo tantas canciones... Ahora al recopilarlas, me he dado cuenta', apuntó.
Pero los años no son un obstáculo para seguir creando e inspirarse. 'Para componer es necesario no perder la ilusión, eso es el motor de todo', explicó un músico que considera 'euforizante' componer, aunque reconoció que la inspiración 'no es la magia que baja a la tierra'. 'A veces lo haces mejor y, otras, peor', prosiguió, reconociendo que 'unas canciones deslumbran y otras son rutina'. 'Hay que ponerse el mono y trabajar'.
Las temáticas son una constante en su trayectoria si bien recordó como el periodo 'más político y lastrado' el de los años 72 al 79. 'A veces confundía profesión con militancia', recordó un músico cuya cercanía con el PCE le trajo como consecuencias sufrir en sus letras la censura e incluso el exilio durante seis meses en México junto a Ana Belén.
'LO QUE ME MUERDE LAS ENTRAÑAS'
'Nunca he dejado de cantar a lo que tengo delante de los ojos, lo que me muerde las entrañas', dijo, convencido de que a través de su música 'se ve la historia de este país'. 'Intento cambiar un poco el mundo', continuó un artista que se considera 'poco inspirado' por la política actual. 'Es una historia de buenos y malos y no creo que sea así. Soy optimista, pero algunos medios tratan de mostrar un país crispado', criticó, sorprendido porque 'la derecha siga tan polvorienta'.
Sin dejar de trabajar ni un minuto, Víctor Manuel presenta ahora este libro, prepara a la vez el Centenario de Salvador Allende y la gira de su próximo disco, que incluye canciones en alusión a la memoria histórica, las mujeres 'en positivo y en negativo', la ecología, el amor entre un legionario y un guardia civil, canciones de amor o sobre pobres, así como otra dedicada a los niños con fibrosis quística.
CRISIS DEL DISCO
En 2008 estará de gira en solitario y junto a Ana Belén. 'No somos nada competitivos y son años de ayudarse el uno al otro. Ana Belén es una artista maravillosa y yo, sólo lo intento', añadió el músico, al que le gustaría colaborar con 'artistas folclóricos de maestría absoluta' como Milladoiro.
Por último, Víctor Manuel se refirió a la 'crisis' que sufre la industria del disco por la piratería. 'El soporte disco está en una postración muy indeseable', se quejó, recordando a los consumidores que la música gratis sólo 'mata a los músicos'. 'Entre todos la mataron y ella sola se murió', concluyó.
Pese a que Víctor Manuel confesó que le gusta su 'profesión' como compositor, su verdadero oficio es 'escribir las canciones y cantarlas'. 'Los directos son una droga dura y es difícil dejarlos. El aplauso es un veneno, se necesita para respirar', afirmó el creador de clásicos como 'La madre', 'La romería', 'Sube al desván', 'Bailarina' o 'Ay, amor'.
A este respecto recordó las giras en solitario así como las conjuntas, tanto con su mujer Ana Belén, como con otros artistas como Joaquín Sabina o Joan Manuel Serrat (El gusto es nuestro, Mucho más que dos o Dos en la carretera). 'A veces en las giras conjuntas hay incógnitas y te pones en lo peor, pero luego el disfrute ha sido absoluto y nos hemos hecho amigos inseparables', afirmó el músico asturiano.
TANTAS CANCIONES...
Respecto a escribir para otros, confesó que sobre todo lo ha hecho para su mujer y los encargos le gustan menos. 'Me gusta componer para mí y lo que no me sirve a mí, tampoco sirve para los demás. Lo que no me sirve, lo tiro y tengo muy pocos temas no grabados. Y no sé cómo tengo tantas canciones... Ahora al recopilarlas, me he dado cuenta', apuntó.
Pero los años no son un obstáculo para seguir creando e inspirarse. 'Para componer es necesario no perder la ilusión, eso es el motor de todo', explicó un músico que considera 'euforizante' componer, aunque reconoció que la inspiración 'no es la magia que baja a la tierra'. 'A veces lo haces mejor y, otras, peor', prosiguió, reconociendo que 'unas canciones deslumbran y otras son rutina'. 'Hay que ponerse el mono y trabajar'.
Las temáticas son una constante en su trayectoria si bien recordó como el periodo 'más político y lastrado' el de los años 72 al 79. 'A veces confundía profesión con militancia', recordó un músico cuya cercanía con el PCE le trajo como consecuencias sufrir en sus letras la censura e incluso el exilio durante seis meses en México junto a Ana Belén.
'LO QUE ME MUERDE LAS ENTRAÑAS'
'Nunca he dejado de cantar a lo que tengo delante de los ojos, lo que me muerde las entrañas', dijo, convencido de que a través de su música 'se ve la historia de este país'. 'Intento cambiar un poco el mundo', continuó un artista que se considera 'poco inspirado' por la política actual. 'Es una historia de buenos y malos y no creo que sea así. Soy optimista, pero algunos medios tratan de mostrar un país crispado', criticó, sorprendido porque 'la derecha siga tan polvorienta'.
Sin dejar de trabajar ni un minuto, Víctor Manuel presenta ahora este libro, prepara a la vez el Centenario de Salvador Allende y la gira de su próximo disco, que incluye canciones en alusión a la memoria histórica, las mujeres 'en positivo y en negativo', la ecología, el amor entre un legionario y un guardia civil, canciones de amor o sobre pobres, así como otra dedicada a los niños con fibrosis quística.
CRISIS DEL DISCO
En 2008 estará de gira en solitario y junto a Ana Belén. 'No somos nada competitivos y son años de ayudarse el uno al otro. Ana Belén es una artista maravillosa y yo, sólo lo intento', añadió el músico, al que le gustaría colaborar con 'artistas folclóricos de maestría absoluta' como Milladoiro.
Por último, Víctor Manuel se refirió a la 'crisis' que sufre la industria del disco por la piratería. 'El soporte disco está en una postración muy indeseable', se quejó, recordando a los consumidores que la música gratis sólo 'mata a los músicos'. 'Entre todos la mataron y ella sola se murió', concluyó.
