La fadista Kátia Guerreiro conmemora sus diez años sobre los escenarios con 'Nas asas do fado', un álbum doble que compila las composiciones favoritas de la cantante y los duetos que ha realizado con los artistas Rui Veloso, Amina Alaoui y Simone de Oliveira, entre otros.
Javier F. Jódar.El año 2010 supuso la confirmación de Kátia Guerreiro como una de las fadistas más importantes de Portugal, donde nació 'la verdadera canción de los sentimientos', según ha afirmado la cantante en una entrevista con Efe en la que compara al fado con 'músicas calientes' como el blues.
La artista actuó el año pasado como solista en el Coliseo de Lisboa y ofreció distintos conciertos con la Orquesta de Baja Normandía y la Filarmónica de Berlín, una prestigiosa agrupación que invitó por primera vez en su historia a una fadista, cuya interpretación hizo llorar a los músicos, según descubre ella misma.
Guerreiro, nacida en Sudáfrica y criada en las Islas Azores, consiguió el Premio Amália Rodrigues 2010 a la Mejor Intérprete, un reconocimiento que le llenó de satisfacción. 'Ella fue quien hizo del fado una música importante', indica la cantante, a quien le incómoda la imagen que se ha difundido de la diva, siempre 'cigarro en mano, con una copa o en la cama'.
De hecho, ha criticado la película 'Fados' (2007), de Carlos Saura, de quien dice que estuvo 'mal asesorado' a la hora de abordar el recorrido histórico de esta música.
'Saura no tiene una verdadera noción de lo que pasó porque fue aconsejado por gente poco honesta', sentencia Guerreiro, quien no comprende que el cantante Carlos de Carmo tenga mayor protagonismo en dicho documental que Rodrigues.
De los diferentes encuentros artísticos que hay en su último álbum 'Nas asas do fado' ('Las alas del fado'), Guerreiro ha destacado la presencia de la intérprete marroquí Amina Alaoui, con quien grabó 'Voz do vento'.
'El fado y la música árabe comparten un mismo espíritu', explica la cantante, quien además subraya que otras músicas como el tango y el flamenco también sobrevivieron gracias a la transmisión oral, además de tener su origen en los barrios más humildes y haber nacido casi al mismo tiempo.
Pese a ser una defensora acérrima del fado, Guerreiro comenzó su carrera en como integrante de grupos de rock durante su adolescencia.
Ahora ha vuelto a firmar 'una balada de rock' junto a Rui Veloso, considerado como el padre del rock portugués, con quien canta a dúo 'A veia do poeta'.
Guerreiro, quien estudió medicina en Lisboa, ejerce como oftalmóloga en un hospital de la capital lusa -hace tres días operó un paciente de cataratas- algo que le aporta 'un equilibrio' en su vida porque le permite 'tener un pie en la vida real'.
La artista actuó el año pasado como solista en el Coliseo de Lisboa y ofreció distintos conciertos con la Orquesta de Baja Normandía y la Filarmónica de Berlín, una prestigiosa agrupación que invitó por primera vez en su historia a una fadista, cuya interpretación hizo llorar a los músicos, según descubre ella misma.
Guerreiro, nacida en Sudáfrica y criada en las Islas Azores, consiguió el Premio Amália Rodrigues 2010 a la Mejor Intérprete, un reconocimiento que le llenó de satisfacción. 'Ella fue quien hizo del fado una música importante', indica la cantante, a quien le incómoda la imagen que se ha difundido de la diva, siempre 'cigarro en mano, con una copa o en la cama'.
De hecho, ha criticado la película 'Fados' (2007), de Carlos Saura, de quien dice que estuvo 'mal asesorado' a la hora de abordar el recorrido histórico de esta música.
'Saura no tiene una verdadera noción de lo que pasó porque fue aconsejado por gente poco honesta', sentencia Guerreiro, quien no comprende que el cantante Carlos de Carmo tenga mayor protagonismo en dicho documental que Rodrigues.
De los diferentes encuentros artísticos que hay en su último álbum 'Nas asas do fado' ('Las alas del fado'), Guerreiro ha destacado la presencia de la intérprete marroquí Amina Alaoui, con quien grabó 'Voz do vento'.
'El fado y la música árabe comparten un mismo espíritu', explica la cantante, quien además subraya que otras músicas como el tango y el flamenco también sobrevivieron gracias a la transmisión oral, además de tener su origen en los barrios más humildes y haber nacido casi al mismo tiempo.
Pese a ser una defensora acérrima del fado, Guerreiro comenzó su carrera en como integrante de grupos de rock durante su adolescencia.
Ahora ha vuelto a firmar 'una balada de rock' junto a Rui Veloso, considerado como el padre del rock portugués, con quien canta a dúo 'A veia do poeta'.
Guerreiro, quien estudió medicina en Lisboa, ejerce como oftalmóloga en un hospital de la capital lusa -hace tres días operó un paciente de cataratas- algo que le aporta 'un equilibrio' en su vida porque le permite 'tener un pie en la vida real'.
