Francia lloró ayer la muerte del cantautor Georges Moustaki, artista de origen griego nacido en Alejandría que se convirtió en una de las grandes plumas de la 'chanson française'. Moustaki, viajero de verbo libre y comprometido, amante de la vida y de sus placeres, falleció ayer, a los 79 años, en Niza, a orillas del Mediterráneo que le vio nacer. La enfermedad pulmonar incurable que se lo llevó, le había apartado de los escenarios en 2009, tras un último concierto en Barcelona.
El presidente de Francia, François Hollande, le recordó como un 'inmenso artista cuyas canciones populares y comprometidas han marcado a varias generaciones de franceses'.
Entre quienes lanzaron una última mirada a la vida de Moustaki, pupilo de Brassens y amante de Piaf, se cuenta la cantante Juliette Gréco, a la que se conoce como 'la musa de los existencialistas', quien lamentó ayer al conocer la muerte de su amigo la pérdida de 'un hombre absolutamente exquisito'.
Entre quienes lanzaron una última mirada a la vida de Moustaki, pupilo de Brassens y amante de Piaf, se cuenta la cantante Juliette Gréco, a la que se conoce como 'la musa de los existencialistas', quien lamentó ayer al conocer la muerte de su amigo la pérdida de 'un hombre absolutamente exquisito'.
