El Antela se quedó con la victoria, la tercera en su feudo, tras derrotar por 2-1 al Peroxa que de esta manera cae por primera vez en puestos de descenso directo.
Las lágrimas del jugador visitante Pepe, a la conclusión del partido evidenciaban la impotencia de un equipo que sufrió el quinto revés consecutivo y que sobre el campo hizo sobrados méritos para no marcharse de vacío de A Moreira.
El Antela se vio sorprendido por un rival que salió con las pilas cargadas y dando una imagen positiva que no concuerda con su situación actual en la tabla de posiciones.
Los movimientos ofensivos de Cristian Blanco eran su mejor aval, ya que de sus internadas por la banda y posteriores centros al corazón del área nacian las ocasiones. Pedro, entrqando por el segundo palo cabeceó un centro en que con muchos apuros alcanzó a despejar el portero limiano.
Los antelanos buscaron responder con acciones personales de Rivero, que junto a Bass eran los únicos que entendían cual era el libreto que su entrenador les recordó en la charla técnica.
De una estupenda asistencia de Rivero dejó sólo a Figueirido para resolver dentro del área, pero acabó transtabillando con el balón al que terminó abrazando.
El 1-0 llegó de una manera sorpresiva, como el centro chut de Rivero que se coló por el primer palo.
El Peroxa buscó su suerte en el área rival y casi empata. De un saque de esquina de Juanma, apareció el cabezazo de Pepe que se marchó apenas sobre el larguero.
En la segunda parte, el empuje del cuadro visitante fue más constante. Juanma probó de falta a doblegar a Julián, pero el meta sacó el lanzamiento sobre el travesaño.
Respondió el Antela con un potente tiro de Joni que Iván mandó sobre el larguero al córner. De esta jugada nació el 2-0. El portero del Peroxa se quedó a mitad de camino en la salida tras el saque de esquina y Figueirido lo aprovechó cabeceando el balón en el segundo palo.
Inexplicablemente el Antela se relajó y el Peroxa lo fue arrinconand. Con dos minutos en el campo, Rodri metió la puntera para colocar el 2-1 y darle vida a su equipo que lo intentó por las bandas, colgando balones buscando la cabeza de un compañero para empatar.
El Peroxa murió con las botas puestas, pero con la actitud de ayer podrá reflotar. El Antela no enamoró, pero se llevó los tres puntos.
Los banquillos
"No fue nuestra mejor versión, pero lo importante fueron los tres puntos. Nos costó mucho la segunda parte y en un campo blando y pesado nos tocó sufrir", dijo el entrenador Miguel Alonso, del Antela.
"Como mínimo merecimos el empate y nos llevamos otra derrota. La dinámica parece cambiar, poniendo en problemas al Antela en su campo", comenó el técnico Miguel Carballo, del Peroxa.
