El equipo limiano, mejor y más intenso, superó a un desconocido Barbadás en un derbi de polos opuestos en la clasificación
Los que dicen que, en un derbi, la clasificación importa poco, vuelven a tener un argumento de peso a su favor. El Antela, que llegaba como colista, en una mala racha dentro de una dura temporada, superó con merecimiento a un Barbadás que parecía que había encontrado el camino correcto para pelear de tú a tú por el ascenso. Los limianos demostraron que, cuando están casi al completo, son competitivos. Jugaron mejor y pusieron más ganas sobre A Moreira. Enfrente, un equipo azulón desdibujado y son la intensidad que exigía la cita. El 2-0 final supone un patinazo para los de Juanjo Vilachá.
El Antela salió mejor desde el principio. Enrabietados por la mala imagen dejada hace una semana en el mismo escenario, los de Moisés Pereiro protagonizaron los primeros acercamientos. En el minuto 6, un centro desde la parte izquierda le cae a Carlos, pero su remate por bajo se encuentra con las piernas del meta Borja.
Los mismos protagonistas se volvieron a ver las caras veinte minutos después, con idéntico resultado. Y es que el portero del Barbadás fue el mejor jugador de los azulones en la tarde de este sábado.
Eso sí, no pudo hacer nada a la media hora cuando, tras una jugada por la izquierda, Xoel se pudo acomodar el balón y marcar el primer gol desde dentro del área. Una jornada más, el Antela se ponía por delante.
El golpe pareció espabilar al Barbadás. Sin alardes, intentaron pisar más el campo contrario. La mejor ocasión, al filo del descanso. Dani Chimpín controló un balón en posición franca y su remate, desviado por Juan Carlos, salió pegado al palo. Camino de los vestuarios con ventaja local y mucho que mejorar por parte de la escuadra visitante.
Gol tempranero
Si los azulones lo fiaban a un inicio de segunda parte diferente, se equivocaron radicalmente. Nada más reanudarse el juego, una pérdida de balón en la medular permitió a Joni y Carlos elaborar una jugada que Breogán Pereiro se encargó de culminar con una certera volea. Era el 2-0 y otro jarro de agua fría para el Barbadás.
Juanjo Vilachá movía el banquillo buscando una reacción a la desesperada. Al otro lado, Moisés Pereiro pedía cabeza a los suyos para evitar que la "maldición" de las remontadas se volviera a cruzar en su camino. Pero esta vez los limianos gestionaron bien su ventaja. Incluso pudieron aumentarla si Joni acierta a definir en el mano a mano con Borja que, con ayuda del larguero, desbarató la ocasión en el minuto 60.
Por orgullo y con un activo Igor Souza en el campo, el Barbadás se fue arriba. Pero su fútbol fue demasiado directo y la zaga del Antela lo supo neutralizar sin pasar grandes apuros. Un tiro desde la frontal de Martín Torres o un par de saques de esquina que llevaron el "uy" a la grada, fueron sus mejores bazas. Enfrente, los limianos perdonaron una clara contra culminada por Joni.
Ni el largo descuento cambió el resultado. Esta vez sí el Antela puso el candado al partido y se llevó una alegría. No le sirve para abandonar el último puesto de la clasificación pero sí para saber que tiene que hacer de aquí al final de liga. Mientras, el tropiezo del Barbadás supone un frenazo a su escalada. Hoy, con el grueso de la jornada en disputa, sabrá cuánta comba ha perdido en la pelea por el ascenso. Los azulones aprendieron de primera mano que si bajas las revoluciones cualquier equipo te pega un revolcón. Y si lo haces en un derbi, es más probable que suceda.
