El Barbadás se gusta

Rivero, autor de dos goles, festeja el segundo con el capitán del Barbadás, Toño Nespereira.
photo_camera Rivero, autor de dos goles, festeja el segundo con el capitán del Barbadás, Toño Nespereira.
Un doblete de Rivero y los goles de Nespereira y Xinzo le dieron dieron el triunfo a un Barbadás que sigue en lo más alto

Después de tres partidos sin ganar y 312 minutos sin marcar, el líder Barbadás vuelve a sonreír tras golear al Portonovo en un partido de claro dominio local. Los azulones salieron intensos y presionaron la salida de balón de unos arlequinados que no eran capaces de aproximarse al área contraria. Las primeras situaciones de peligro de los de Agustín Ruiz tuvieron el nombre de Marcelo, que con dos cabezazos por encima del larguero metieron el miedo al conjunto contrario. Poco a poco, los visitantes se fueron sintiendo más cómodo sobre el verde, aunque sin profundidad y las ocasiones de gol las seguían creando los de casa. En el minuto 41, Ismael recibió un pase filtrado de Rivero para probar fortuna con un disparo que se fue pegado al poste izquierdo de Juan.

Cuando ya parecía que se iba a llegar al descanso con el 0-0 llegó el tanto del Barbadás.  Pase en largo a Rivero, el meta Juan se anticipa y bloca el balón, pero tras chocar con un compañero la pelota queda muerta para que el propio Rivero anote el 1-0 a portería vacía. Con ese tanto los de A Valenzá volvían a ver puerta después de más de 300 minutos.

Tras el paso por la caseta, los locales salieron aún más enchufados y a los seis minutos de la reanudación anotaron el 2-0. Toño botó un córner que se encontró con un impecable cabezazo de su hermano Nespereira en el primer palo.

Poco después, el capitán azulón asistió a Rivero, que en la banda izquierda recortó a su par y batió a Juan con un tiro raso por el primer palo. Con el 3-0, el técnico Agustín Ruiz optó por mover el banquillo y el partido entró en una fase tediosa hasta que Parada, en una contra, aprovechó la asistencia de Fran Matos para acortar distancias. Aún habría tiempo para que Xinzo, que regresaba a los terrenos de juego tras varias semanas ausente por una rotura muscular, marcara de cabeza tras un centro de Nespereira, el 4-1 definitivo.

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