El Ourense Oupen bajó el telón. Lo hizo con la jornada dominical y con los mejores de la competición en liza. El torneo, disputado en el Club Santo Domingo, repartió 2.000 euros en premios, lo que aumentó el nivel del cuadro de participantes. El fin de fiesta llegó con las dos finales, la absoluta masculina y la absoluta femenina, que tuvieron a los problemas físicos como grandes protagonistas.
Las mujeres fueron las primeras en salir a la pista. A un lado, la gallega Uxía Martínez, habitual en el podio autonómico. Al otro, Raquel Amaro, venezolana con raíces celanovenses y que estudia y juega en una universidad estadounidense. Y ese nivel lo demostró con creces. Amaro dominó a una rival mermada, que arrastraba una lesión en el pie que le impidió mostrar su mejor tenis.
Eso sí, Martínez dio la cara hasta el final, aguantó en pista, pero no pudo hacer nada para evitar el triunfo de Amaro por 6-2 y 6-3.
A continuación, los hombres. Veteranía contra juventud. El experto Rodrigo Figueroa contra el prometedor David Cao. Un duelo muy igualado. La primera manga cayó del lado de Figueroa tras un 6-4. El mismo resultado se lo devolvió Cao en el segundo set para prolongar el partido. Y ahí, cuando Figueroa lo tenía casi ganado (con 5-2 a su favor y saque) llegó la lesión decisiva. Un fuerte calambre, un problema sin solución y una retirada forzosa. El triunfo se quedó para Cao.
Fue un colofón agridulce a un torneo que cumplió con las expectativas. Desde la organización confirman que tiene voluntad de continuar y hacerlo sin renunciar a crecer. Confían en reunir a las mejores raquetas autonómicas y "convencer" a algún tenista nacional. Queda un año para intentar conseguirlo.