El Cidade saluda a la Liga entre la ilusión y las dudas

La mejor liga de fútbol sala del mundo regresa a escena. Lo hace tres meses y medio después del play off por el título que encumbró al Burela en Málaga. Justo el doble de ese tiempo, siete meses, es lo que lleva sin competir un Cidade de As Burgas que mañana arranca la temporada 2020-2021 (el Envialia sigue confinado y debe esperar) entre la ilusión por seguir disfrutando de la élite con un nuevo proyecto y las dudas por la situación de la pandemia del coronavirus. Sin fichajes y sin María Arias pero con la clara convicción de que un grupo de jóvenes canteranas inicien su singladura en Primera como en su día hicieron las Iria Saeta, Vane Sotelo o Ana Lastra. "Tengo muchísimas ganas de ver de qué son capaces esta generación tan interesante que llega. Amelia, Clara o Canolich deben confirmar que son jugadoras protagonistas en el equipo: jóvenes en edad pero tiene que ser su temporada. Y después Sol, Fara, África y Carlota, jugadoras de 15 y 16 años en las que tengo muchísima confianza. No sé hasta dónde llegarán estas chicas, pero esta generación me recuerda a la de Iria y a la de Vane, jugadoras de mucha calidad, con descaro y que pueden dar mucho. La paciencia será clave, tanto de los técnicos como las propias jugadoras, pero creo que este es el grupo de jugadoras de más calidad de las últimas temporadas", subraya Manolo Codeso, el entrenador. El objetivo competitivo volverá a ser la permanencia, pero el reto como club es "dar minutos a las jóvenes para que crezcan como jugadoras", añade el técnico. La temporada del coronavirus y de los subgrupos no dará tregua. "Con una primera fase en la que cinco equipos de nueve pasan al grupo por la permanencia en el que después habrá cuatro descensos cualquier punto que logres o te dejes puede ser definitivo". Y para abrir boca, un viaje de casi 1.000 kilómetros para medirse a un Penya Esplugues que "sin hacer ruido y sin estrellas siempre está bien clasificado. Le vi el amistoso ante Zaragoza y aunque perdió me gustó mucho. Será un rival complicado", finaliza Manolo Codeso. El detalle A cuarenta horas del partido el Cidade desconocía el hotel en el que pernoctará hoy. Organizar un viaje con las restricciones en diferentes comunidades es un examen más duro que cualquier partido. El protocolo indica que hay que dormir, desayunar y comer en el mismo establecimiento, para minimizar contactos, pero ninguno con los que hablamos nos ofrece ese servicio. Nos tocará cenar en el bus y quizá también dormir", lamenta Codeso.