Os Remedios le quitó esta semana el precinto a la carpeta del fútbol base. La agenda del estadio Miguel Ángel ya tiene a los equipos de fútbol-8 entrenando y los niños demuestran que, con las medidas necesarias, se puede ir retomando la normalidad también en el deporte de base. Sin partidos, pero volviendo a la rutina de hacer la bolsa de entrenamiento en casa, calzarse la botas en el campo y salir de clase pensando en lo que más les gusta. Con mascarilla, pero el fútbol vuelve a la rutina de los niños en Ourense. Verlos por la tarde camino de los entrenamientos es una noticia sensacional que no se refleja en los marcadores ni en las clasificaciones.
El baloncesto también suelta amarras. La semana pasada se jugaron partidos de ascenso a Ligas Gallega cadetes con varios equipos ourensanos en liza y este fin de semana ya comenzaron algunas de las ligas de los más "canijos" y "canijas".
Goles y tiples al covid gracias a clubes que en la temporada más injusta hacen el doble de esfuerzo para que los niños puedan volver a soñar con ser estrellas. Y en sus sueños juegan sin mascarilla.
