Jácome anuncia una San Martiño para 2020, pese a que no se permiten las carreras de fondo

La Popular do San Martiño es una de las muchas competiciones amenazadas por la pandemia. El alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, aseguró que la edición número 44 no faltaría a su cita con el calendario y se atrevió a pronosticar que "en un época gris vamos a aportar algo de luz" con la celebración de la prueba. Se olvidó de los condicionantes y de las normas actuales que afectan a todo tipo de deportes y que, en el caso de la San Martiño, prohíben su celebración. "No hay protocolo para las carreras de fondo en Galicia. A día de hoy no existe ese protocolo y no están permitidas ese tipo de carreras". El que lo explica el vicepresidente primero de la Federación Gallega de Atletismo, el ourensano Lalo Gómez. Por la mañana Jácome decía que la carrera "la coorganizaremos junto a la Federación Gallega de Atletismo". Por la tarde Gómez aseguraba que "a nosotros, a día de hoy, nadie nos ha consultado, nos ha pedido consejo o nos ha pedido permisos desde la organización de la San Martiño". Y añadía: "Queda mucho y ojalá se pueda hacer, pero a día de hoy es inviable". Además, el alcalde desveló que el recorrido será por las orillas del río Miño. Sin precisar más datos salvo que será una sola vuelta a un recorrido de exactamente 10 kilómetros. Esa modificación ya cambia radicalmente el enfoque de la carrera. Gómez dice que "la San Martiño tiene un recorrido concreto, que está homologado y que le permite ser una carrera que está encuadrada dentro del calendario oficial de carreras de la Federación Gallega". Ese cambio en el recorrido generó numerosas críticas en las redes sociales e invita a pensar que es una medida que tiene como único objetivo tachar en el calendario una nueva edición de la cita deportiva, pero saltándose su objetivo de carrera "popular". Más un contrarreloj que una carrera El último ganador de la carrera, el ourensano Alejandro Fernández, reconoce que "es la cita más importante y la que más ilusión me hace cada año y tengo claro que con estos cambios no será lo mismo. No voy a mentir, no es lo mismo correr junto al río que por la ciudad", pero asegura que "es mejor esto que nada. Si no hay más remedio habrá que aceptarlo porque es mejor que haya carrera, sea como sea, a que se suspenda. Lo primero es la salud de los deportistas". Con distinto recorrido y con un formato también totalmente nuevo. Jácome dice que "serán salidas en grupos de 200 corredores, porque esperamos que sean más de 200 los que se apunten". Será entonces una especie de contrarreloj, aunque el ejemplo de una de las más recientes, en Barcelona (Cursa de la Merced), se disputó la prueba con ese formato y las salidas se tuvieron que espaciar durante dos días y saliendo en grupos de no más de seis corredores. El último cambio es la limitación a corredores mayores de edad, lo que dejaría a la San Martiño sin dos de las carreras que la reivindican, la de escolares y la de "cativos". El protocolo: no existe para el fondo en carretera El atletismo ha vuelto en los últimos meses, pero solo en pista. En Galicia "a día de hoy no existe un protocolo para el fondo en carretera. Somos conscientes de los muchos atletas que practican esta modalidad y estamos en constante trabajo para sacar un protocolo adelante. Es posible que lo acabemos teniendo, pero no lo hay". El atletismo, como cualquier deporte, se rige en Galicia por el Fisicovid-DXT Galego. El recorrido: no estaría homologado La salida en el Puente del Milenio y la llegada en rúa Pardo de Cela tras 10 kilómetros por las calles de la ciudad son parte de una carrera que es la cita deportiva más populosa de cuantas se disputan en Ourense. La edición de 2020 que propone el Concello se parecería más a una carrera alternativa que a la San Martiño, empezando por un recorrido que no estaría homologado por la Federación Gallega.