Esta liga ya es historia para el Allariz

El Allariz cumplió el sueño del ascenso y el Seixalbo el de mantenerse en Primera. MARTIÑO PINAL
photo_camera El Allariz cumplió el sueño del ascenso y el Seixalbo el de mantenerse en Primera. MARTIÑO PINAL
El Allariz fue el claro dominador de una temporada que tiene al Loñoá en el sillón de los sufridores por culpa de los arrastres

La Liga 2022-2023 es historia y estuvo marcada por el dominio desde el inicio y con mano de hierro del campeón Allariz y la incertidumbre en el tramo final para saber qué equipo caería en los siempre temidos arrastres. Al Loñoá es a quién le toca esperar para que no descienda ningún ourensano de la Preferente o ascienda uno de sus compañeros de viaje, el Velle o Monterrei. 

Al Allariz le sobraron cuatro jornadas para cantar el alirón, pero acabó con seis partidos consecutivos sin ganar que hacen menos llamativo su dominio en la clasificación. En el último partido perdió ante el Santa Teresita su condición de imbatido en casa durante 24 jornadas. De ese partido salió la salvación del “Santa” y la condena temporal del Loñoá. 

El Monterrei fue el que más aguantó el pulso en la pelea por el título y además acabá la liga con cuatro triunfos seguidos y a tres puntos de los alaricanos. No ganaba en el campo de O Medo desde el 26 de marzo de 2017, cuando goleó 1-4 al Vilariño con un  “hat trick” de Abdoulaye y otro tanto de Jo. Al equipo de Bruno Gómez le queda ahora pelear en los play off de ascenso por la única plaza restante para subir a la Preferente. El primer escollo será el Atlántida Matamá.

El otro gran protagonista de la liga fue, sin duda, el Velle de Peluso, que terminó la fase regular sin sufrir traspiés en sus últimas diez comparecencias, llevando nueve partidos sin caer en el Monte de Aira y convirtiéndose en el mejor equipo de la segunda vuelta. Empezaron y acaban lanzados los metropolitanos. Todos estos buenos resultados deberá refrendarlos en la primera cita por el ascenso frente al equipo del Ponte Caldelas.

El Polígono, a pesar del cambio de entrenador a mitad de camino, intentó ser protagonista, pero en el momento menos oportuno dejó escapar 10 puntos  y de esa forma quedar descolgados. El polo opuesto fue el Celanova, que fue de menos a más, pero terminó acusando bajas importantes para resignarse y contemplar a los favoritos desde el cuarto puesto.

Te puede interesar