La jugadora pamplonesa Iraia Arbeloa, de solo 17 años, procedente del Amarelle coruñés y es el cuarto fichaje para el nuevo proyecto pontino
Un ala muy competitiva, de buen uno contra uno, con gol y desparpajo, y todo a ello a pesar de tener solo 17 años. El Ourense Envialia acaba de fichar a otra joya por pulir. Se trata de Iraia Arbeloa (Pamplona, 26 de julio de 2001). Procede del Amarelle coruñés, equipo al que había llegado hace ahora un año para debutar en la Primera División, y se convierte en el cuarto fichaje del equipo blanquinegro para el curso 2019-20.
"¿Ourense y el Envialia? Estoy muy contenta", afirmó la nueva jugadora del equipo ourensano. Y eso que la decisión tomada "fue difícil". Porque a la joven jugadora pamplonesa le petaron a la puerta muchos equipos, entre ellos Poio y Zaragoza. Difícil en todos los sentidos, y mucha pena por dejar A Coruña y el Amarelle. "Con Jorge (Basanta, el entrenador de las "laranxas") aprendí muchísimo". Pero el potencial de Iraia perdería visibilidad en Segunda tras el descenso coruñés.
La decisión de la nueva jugadora de recalar en el Envialia estuvo motivada no por el gran pasado del equipo (campeón de liga, ibérico, de la Copa y la Supercopa de España...), ni tampoco por el sensacional presente (tercero en liga, subcampeón de Copa Galicia y semifinalista en la Copa de la Reina este curso), si no por el futuro. "Me dicidí por Ourense por el proyecto del Envialia. Es uno de los equipos importantes de la liga y tiene un gran futuro. Además, me basé en el entrenador, porque todo el mundo me habló maravillas de él. En Pamplona, persona con la que hablé después de tener la opción de Ourense me dijo que no me lo pensara, porque Morenín es un grandísimo entrenador". Y aquí está.
El Orvina navarro fue su casa toda la vida. Allí jugó nueve años. "Empecé a jugar antes de cumplir los 10. Tenía el precedente de mi padre, que siempre jugó de portero, y después mi hermano también empezó en el fútbol sala, pero se lesionó la rodilla y lo dejó. Ahora soy yo la que continúo de la familia en este deporte", añade. "Me quedé con la espina de no jugar con Orvina en Primera, porque justo la temporada que descendió yo no tenía la edad para jugar. Empecé la temporada siguiente (2016-17), en Segunda, y jugamos el play off de ascenso, y el segundo año en el primer equipo marqué 23 goles. Y después, al Amarelle".
Precisamente gol es lo que tratará de aportar al Envialia la próxima temporada, pero también trabajo, mucho trabajo. "¿Definirme como jugadora? Soy muy veloz y luchadora. Prometo esforzarme mucho para seguir mejorando y ayudar al equipo", añade Iraia Arbeloa, otro proyecto de jugadora con futuro que llega a un Envialia que sigue teniendo claro cuál es el plan de ruta.
Algunas conocidas
El fichaje del Envialia ya conoce a algunas de las jugadoras de su nuevo equipo, no solo por haberse enfrentado a ellas el pasado curso si no además por coincidir en la selección gallega sub-21. "Coincidí con María, Vera e Idoya".
A partir de agosto comenzará a trabajar con el equipo en el nuevo proyecto del Ourense Envialia.