El Ourense CF desaprovechó una gran ocasión para seguir enganchado a la liga. Con 0-1 falló un penalti Andoni, hasta que al final logró empatar agónicamente (1-1) ante un Arosa que acabó jugando con ocho y con su defensa, Cotilla, bajo los tres palos.
Los pontinos vivieron durante la primera parte inmersos en el desorden y la descordinación, siendo desbordados por un rival que salió a apretar desde el pitido inicial con un juego intenso, dinámico y que fue profundo en el momento que atravesaba el medio campo. Julio Rey aportaba magia, mientras que Pedro Beda y Róber hacían temblar la estructura defensiva de los ourensanos.
Nada más arrancar el partido, un agarrón de Jerin sobre Ross no fue interpretado como penalti por el árbitro a escasos metros.
La respuesta pontina fue muy tibia, como el frágil remate de Borja Domingo, que más tarde dejó el campo por problemas en su tobillo.
En el Arosa se acumulaban al ataque las subidas por la banda de Cotilla o sorprendiendo en la anticipación el expontino Ross, que hasta se atrevió con un remate que pasó muy cerca del palo izquierdo.
El técnico Rubén Domínguez, junto a su colaborador, buscó en la pizarra (un papel y un boli) dibujar la mejor estrategia para no verse desbordado por un oponente que era bastante mejor, pero al que sólo le faltaba marcar.
La propuesta visitante prosiguió inalterable, hasta que apareció Róber para finalizar una acción combinativa de sus compañeros con un trallazo cruzado desde el pico del área que superó la estirada de Juanvi para establecer el 0-1.
El Arosa tenía todo bajo control y el resultado a su favor que obligaría al Ourense CF a buscar el empate, pero en dos minutos se le complicó sobremanera al serle expulsados dos jugadores.
Esta circunstancia y con casi media hora de juego por delante le abría otra vez el panorama a los pontinos. Cassio dio un aviso con un buen tiro que con la punta de los dedos desvió el portero.
A continuación (m.74) después una mano dentro del área el Ourense CF malgastó la posibilidad de llegar al empate. El penalti lanzado por Andoni, lo acabó parando Álex Cobo contra el palo derecho. La impotencia iba en aumento como los nervios de los jugadores locales, mientras que el Arosa estuvo a punto de sentenciarlo con dos menos. Pedro Beda sacó un derechazo impresionante que estremeció el larguero.
Empate y expulsión
Con más corazón que ideas llegaba el ansiado empate, al conectar Cassio un centro desde la derecha y poner el 1-1.
En el descuento, el portero Álex Cobo queriendo perder el tiempo se ganó dos amarillas dejando al Arosa con ocho. Aún así y con esa diferencia numérica a su favor, los pontinos no fueron capaces de ganar un partido clave de cara al futuro ni doblegar a un conjunto arlequinado que defendió con uñas y dientes un heróico empate.
