El Ourense CF ganó por tres goles a cero al Barco en el derbi celebrado este domingo en O Couto y vuelve a situarse en los puestos que dan derecho a jugar la promoción de ascenso a Segunda B. Mientras el Barco sigue sin levantar cabeza y salvó milagro tendrá que pelear por mantener la categoría.
El encuentro no tuvo demasiada historia, más que nada por que el Barco no compareció en toda la primera parte. Y así es muy difícil llevarse algo positivo de un partido. Desde el primer minuto quedó claro quién de los dos tenía más ganas de llevarse los puntos, y ese era el Ourense CF.
Además, el partido se le puso de cara a los ocho minutos al hacer Borja Domingo el primer tanto desde el punto de penalti. Fue una jugada personal de Wadir, que tras irse de cuatro rivales fue objeto de penalti que el valenciano no perdonó. Los primeros 45 minutos fueron un monólogo local. Wadir, que hizo una gran primera parte y Borja Domingo, eran una pesadilla para la defensa barquense. Jerin, Ces Cotos y Hassane, campaban a sus anchas y la defensa y el meta Sergio no pasaban por ningún apuro. Aunque la peor noticia para los ourensanos fue la lesión de Julio Delgado, que tuvo que dejar el campo a la media hora por un problema muscular. Entró en su lugar Óscar Lorenzo, que sería otro de los destacados. Mientras del Barco, sin noticias.
Antes del descanso, en el minuto 40, llegó el 2-0. Aunque por ocasiones pudo haber sido antes. Pero a los mencionados Wadir y Borja Domingo, unas veces les faltó puntería y otras las evitó el meta visitante Iván Oviedo. No en ese minuto, que rechazó un buen disparo de Wadir, pero que aprovechó el lateral Braganza que había subido al ataque para marcar.
La bronca que le cayó a los jugadores del Barco en el descanso se debió escuchar en Fátima. Cierto que salieron con un poco más de ganas y que también ayudó la entrada de Antonio Vera, que fue el mejor de los visitantes, pero el partido ya estaba muy cuesta arriba.
El Ourense CF, cedió metros a su rival y se dedicó más a contemporizar, pero sin pasar por grandes apuros. Dos remates del nombrado Vera fueron todo el peligro visitante. En los locales una falta de Jerin y un remate de Cássio que sacó Carlos Villar bajo palos fueron lo más destacado antes de entrar en los diez minutos finales.
En el 85 llegó el 3-0. Error garrafal del meta Iván Oviedo al que Óscar Lorenzo le roba la pelota para cedérsela de tacón a Borja Domingo, que sólo tiene que empujarla para hacer el tercero. Y gracias, ya que el poste devolvió un nuevo remate de Lorenzo cuando ya se cantaba el cuarto.
Un derbi que sólo tuvo un color. El Ourense CF, al que le faltan tres partidos, vuelve a soñar con poder luchar por el ascenso. El Barco, sigue en una crisis que parece no tener fin y que demostró en O Couto tener la cabeza en otro sitio y eso es un síntoma muy malo.
