Después de un arranque de competición complicado por culpa de los casos de coronavirus y una vuelta de Navidad también delicada, la Primera División femenina parecía estar recuperando cierta tranquilidad. La pasada semana finalizó una primera fase que solo estaba pendiente de varios partidos aplazados, entre ellos el que esta tarde desde las 19:00 horas iban a jugar en el Pazo el Cidade de As Burgas y el Penya Esplugues, un duelo vital para las ourensanas en la lucha por la permanencia.
Pero no habrá partido. El conjunto catalán reportó el positivo por covid de una de sus jugadoras tras los test que se realizó el jueves y después de repetir a última hora de aquella tarde-noche la prueba y darse idéntico resultado informó a la Federación Española, a la que ayer remitió toda la documentación para solicitar el aplazamiento del encuentro. La Federación todavía no se había puesto en contacto con el club ourensano aunque el responsable de covid-19 del Esplugues habló con el Cidade para comentarle que no viajaría. El protocolo dice que si la jugadora que ha dado positivo no estuvo en contacto con parte o el resto de la plantilla, las demás sí podrían jugar si el resultado de la prueba de antígenos es negativa. En este caso, la jugadora sí estuvo en contacto con la plantilla. Es más, el club catalán entiende que se contagió en el partido aplazado que la pasada semana disputó ante Amarelle, pues una jugadora del equipo gallego dio positivo y tampoco se disputará el Amarelle-Leganés.
Sea como fuere, el Cidade-Esplugues ni se juega hoy ni llegará a disputarse. Como la semana que viene empieza la segunda fase y no habría tiempo material para encontrarle una nueva fecha al aplazado porque el Esplugues deberá estar 10 días de cuarentena e incluso se perderá el arranque del grupo de la permanencia, la federación adjudicará puntos a ambos equipos por coeficiente. "Nos darán 0,2 o medio punto, pero así todo se nos complica porque teníamos una opción de recortar puntos a un rival directo. Ahora, no tenemos ya margen de error en la segunda fase de la liga", se queja el técnico ourensano Manolo Codeso.
