El equipo ourensano regresa a la liga tras el parón del pasado fin de semana y se enfrenta en Málaga a un Axarquía siempre imprevisible
Málaga es esta noche el destino de un COB que pone fin a diez días sin partido debido al parón del pasado fin de semana. Los ourensanos visitan en Málaga al filial del Unicaja (21,00 horas. Telemiño) y buscan su cuarta victoria consecutiva. Un partido complicado para un COB temeroso de como responderá a la inactividad y en alerta ante un rival siempre imprevisible.
El Axarquía solo ha ganado un partido, pero fue el último que disputó en su cancha y derrotando con solvencia al Básquet Coruña. Las perlas del Unicaja empiezan a compactarse y son un equipo que en nada se parecen al inconsistente y errático que empezó la liga.
Enfrente, un COB que llegó al parón lanzando en juego y resultados. ¿Y ahora? Los problemas físicos de jugadores clave como Arco o Rivero condicionaron el trabajo y la inactividad es siempre un hándicap. Con todo el equipo entrenado por Gonzalo García de Vitoria es favorito.
La clave estará en la intensidad y en la concentración. El COB tiene más experiencia y baloncesto. El Axarquía es capaz de encadenar buenas rachas de acierto pero también de no mantener el nivel cuando los contactos y la intensidad lo obligan a tirar de una veteranía que no tiene.
Richi Guillén y Alfonso Sánchez son ahí el sustento de los malacitanos pero hacen falta más argumentos. Necesitan los puntos exteriores de Mo Soulade, la versatilidad de Karahodzic y Sabonis y la presencia física de Diata, Belemene o Akouo. En la dirección, el macedonio Magdevski todavía no ha mostrado el nivel que se espera de él.
Defensa y equilibrio
Las claves del COB no deberían variar. Su defensa es la que le ha permitido encadenar victorias. Un equipo activo en el trabajo de uno contra uno y que no regala nada en los contactos. En ataque el equilibrio de los últimos partidos lo hacen un rival temible. Si anota desde el perímetro se disparan su opciones. Si Rejón o Fieler están cómodos son la guinda.
Con todo el COB tiene claro que sus opciones pasan únicamente por mantener el nivel mostrado. Se enfrenta a un rival exigente, que castigará cualquier tipo de relajación ourensana, pero es una pista asequible en la que el COB puede confirmar su candidatura a todo. Si los ourensanos son capaces de ganar esta noche en Málaga serán tan candidatos como cualquier para pelear por una de las dos plazas en la Copa Príncipe. Un partido clave para pasar de ser uno de los buenos a uno de los mejores.
Málaga, 21,00 h.
