Pelota y sala para el Envialia

El Pazo Paco Paz vivió el pistoletazo de salida de la carrera por el título de liga en la Primera División de fútbol sala femenino para el Ourense Envialia. Ayer, 91 días después de una "rara" sesión de trabajo en Os Remedios aquella tarde del 11 de marzo, cuando las autoridades sanitarias ya vislumbraban que algo no iba bien con el coronavirus (cuatro días después entró en vigor el estado de alarma), el equipo ourensano volvió al trabajo. Lo hace para "tratar de poner la guinda" a una temporada en la que, pase lo que pase ahora en el play off exprés de fin de mes será "más que notable", porque en la coja fase regular a la que le faltaban siete jornadas por disputar volvió a ser el mejor de "la otra liga", pero cada vez más cerca de un Atlético que se ha borrado de la carrera por el título y de un Burela, rival de las ourensanas en la semifinal, que partirá como gran favorito. A la carrera, sin tiempo que perder, porque el Envialia apenas tendrá 15 días para preparar la resolución de la temporada. Y es que la fase final estaba programada inicialmente para el 9 y el 11 de julio (en Málaga), y de golpe y porrazo se ha cambiado para los días 26 (semifinal) y 28 (final), o para el 27 y 29. "No estoy nada contento, porque todo el trabajo que habíamos diseñado para desarrollar en cinco semanas lo tenemos que modificar para hacer en la mitad de tiempo, con el riesgo de lesión que ello supone", lamenta Gonzalo Iglesias "Morenín", el entrenador de las ourensanas. Más contento está con el hecho de que finalmente se dispute un play off que "reconoce el buen trabajo que habíamos tenido durante más de seis meses de competición. Sería injusto no poder jugar, aunque por encima de todo está la seguridad de las jugadoras, cuerpo técnico, árbitros... Obviamente, siempre que se pueda garantizar esa integridad de la gente, jugar es lo que queríamos". Puesta a punto exprés Superado el primer escollo, el de los test serológicos (no hubo ningún positivo ni en la plantilla ni en el cuerpo técnico), el Ourense Envialia se puso manos a la obra de una puesta a punto exprés en la que "trataremos de llegar en las mejores condiciones posibles" después de un parón de tres meses. Poco tiempo para tratar de volver a demostrar que el equipo ourensano es una de las mejores defensas y un bloque compacto que se encontraba en aquel aciago mes de marzo en continua progresión. El Burela espera en la semifinal. Morenín: "Hay que encontrar sensaciones" "Diferente". Así ha calificado Morenín el primer entrenamiento postcovid del Ourense Envialia. "Lo es por muchas cosas. La primera por ser una cancha distinta a la habitual, pero sobre todo porque queremos cumplir al máximo, y un poco más si se puede, las medidas de seguridad que imponen los protocolos y ello nos obliga a estar limpiando el material utilizado constantemente. Pero esta es la nueva realidad que nos toca, al menos durante un tiempo", reconoce el técnico del Ourense Envialia. Para cosas diferentes, la primera ya en el momento de entrar al Pazo, "nos tocó pasar por el arco medidor de temperatura. Quiero agradecer a los gestores del Pazo la predisposición que muestran en todo momento, están pendientes y nos ayudan en todo". Después de tantos días sin trabajar en grupo, el entrenador ourensano es consciente que "lo primero es encontrar sensaciones. Casi se me hacía extraño volver a estar con el silbato dirigiendo un entrenamiento".