Pincha en hueso el Barbadás

El guardameta Toni saca junto al travesaño el cabezazo del portugués Marcelo, ayer en el campo de Os Carrís de Barbadás.
photo_camera El guardameta Toni saca junto al travesaño el cabezazo del portugués Marcelo, ayer en el campo de Os Carrís de Barbadás.
Los ourensanos no encuentran la manera de meterle mano a un Pontellas que tuvo en la bota derecha de Manu la aproximación más cercana al gol

Como llegaron diez victorias consecutivas llegan ahora dos partidos seguidos sin ganar, dos reveses que no comprometen, sin embargo, la cómoda situación del Barbadás al frente de la liga. No supieron como hincarle el diente los ourensanos a un Pontellas que fue mejor en la primera parte y que se marchó del partido con el cartelito honorífico de haber dispuesto de la oportunidad más clara de gol. La malgastó Manu, que pateó fatal y dejó en nada una excelente jugada que inició Samu y continuó Mora. Enfrente, los azulones no escaparon del debate de los últimos días a raíz del Clásico de la Copa, merodeó y merodeó, pero fue incapaz de siquiera acercarse a la red. 0-0, el mismo resultado del Pontevedra B en el José Arjiz de Verín, de manera que las distancias se mantienen, el ascenso a Tercera Federación continúa en la mano.

Con el ritmo con el que empezó el partido el Barbadás difícilmente derrotaría a un equipo malo de una categoría inferior. Plano, sin chispa, sin energía, a los ourensanos les salvó que Marcelo le quitó la pelota a Manu cuando iba a fusilar a Borja Atanes y que el árbitro ignoró una clamorosa falta de Ribao sobre Mora en la frontal. No se había llegado al minuto diez.

Fueron superiores los porriñeses en el primer tiempo, una buena propuesta que hacía aguas a la hora de afrontar el último tercio del campo. Todo lo que fabricaban con combinaciones en medio campo, con cambios de juego cuando era necesario, moría al acercarse a la línea de tres cuartos, entonces la nada. Por algo la clasificación sitúa al Pontellas cuarto por la cola. Para contrarrestarlo intentó meter más potencia al motor el Barbadás, en vano. Apenas un gol anulado a José Ramón después de una pelota que dejó muerta el portero en la pelea con Isma. Bandera arriba del auxiliar, o falta o fuera de juego, no había otra. El caso es que no valió.

Apareció Atanes para sacar abajo junto al primer palo el garrotazo de Javi desde la frontal del área, cinco minutos antes que Parrilla probase al portero desde lejos. El primer acto se consumió con un tuya mía entre Javi y Tico mal resuelto. Apretaron los locales en el segundo tiempo, ganaron más duelos y jugaron más tiempo en campo rival. Lo de las ocasiones de gol quedó para partidos siguientes, Toni se fue del partido con una pelota sacada junto a la escuadra cabeceada por Marcelo cercana la media hora. El resto, centros sencillos para un guardameta y estar atento a las cesiones de sus compañeros.

Con el paso de los minutos fueron replegando velas los visitantes, pero antes de ello dieron el susto con la pifia en el remate de Manu cuando Mora le había dado hecho el gol. Como un disparo arrampló por la banda Marcos, que ganó la línea de fondo y puso una pelota que un defensor golpeó lo justo para que no llegase Litos.

Con un mal control de Nii cuando de haberlo hecho bien se habría quedado ante el guardameta se acabaron las opciones del Barbadás, que aún tuvo que ver como Atanes le rebañaba la pelota a Tico cuando se jugaba el minuto 96.  Ya que no puedes ganar al menos empata.

Final, en dos puntos se reduce la ventaja de los dos primeros sobre el Atios, vencedor frente al Celtiga, al que los ourensanos aventajan en nueve, diez al Juvenil de Ponteareas. 

Otro de los que ocupan puesto de descenso espera ahora al líder de la competición, el Moraña, un recién ascendido que puso fin en Cambados a una sangría de cuatro derrotas consecutivas.

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