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Los retos del Rio Ourense Termal

Balón de baloncesto

El comienzo de la temporada de la Liga Leb Oro ha dejado entrever lo que depara el futuro para el Rio Ourense Termal en esta temporada 2018/2019. La categoría de plata es una competición muy igualada en la que hay que pelear los partidos hasta el último segundo para evitar sorpresas desagradables. 

El equipo dirigido por Gonzalo García de Vitoria parte con el objetivo prioritario de asegurar la permanencia cuanto antes. Este año serán tres los equipos que pierdan la categoría en vez de los dos que descencían en las temporadas anteriores. Una vez asegurada la permanencia, el equipo ourensano tendrá permiso para soñar con metas más ambiciosas.

A priori, según las apuestas Betway deportivas y otras páginas especializadas, los favoritos al ascenso son el Bilbao Basket, el Real Betis Energía Plus y el Iberojet Palma. El plan de juego trazado por García de Vitoria pasa principalmente por la defensa. El técnico bilbaíno conoce a la perfección las limitaciones del club y de su plantilla y apuesta por llevar los partidos al barro, por hacer sufrir a los rivales. Para lograr los objetivos será fundamental la contribución de una afición que ya ha tendido la mano al equipo en más de una ocasión. El público debe abarrotar el Pazo y, con su apoyo, reforzar la moral y las energías de unos jugadores que tendrán que jugar al límite. 

El año pasado el equipo tuvo la peor racha de resultados de la categoría al enganchar nueve derrotas consecutivas. Afortunadamente la directiva mantuvo en el cargo al preparador vasco y el final de año fue espectacular con 11 victorias en 12 partidos. Se consiguió la salvación y a punto estuvo el equipo de jugar el play-off de ascenso. Este año se busca mejorar los resultados desde el comienzo y no pasar apreturas. Desde luego hay que evitar rachas tan nefastas como la de las nueve derrotas en serie. 

Este año el equipo ha comenzado emitiendo buenas señales. Por ahora el plan defensivo de García de Vitoria se está implementando a la perfección y el Club Ourense de Baloncesto tiene la mejor defensa de la liga. Los problemas surgen en ataque. El equipo no va sobrado de talento ofensivo y no le sobran los puntos. Tras la grave lesión de Pol Molins, urge la contratación de un anotador de perímetro de garantías.

Esas carencias ofensivas hacen que la defensa multiplique su incidencia en el juego. Jugadores como Sergio Rodríguez, Jhornan Zamora o Kevin van Wijk, sin ser anotadores puros, deben asumir el liderazgo en ataque del equipo. Contra el Liberbank Oviedo disputó sus primeros minutos el último fichaje del equipo, el pívot Duby Okeke, un jugador interior intenso, con gran capacidad defensiva y reboteadora. Okeke tiene características similares a las de Earl Watson al que una lesión lo tendrá de baja por tiempo indefinido, aunque se espera que reaparezca más pronto que tarde. Davis Rozitis deberá hacerse gigante -más allá de sus 2,13 metros de altura- en el poste bajo. La experiencia de jugadores como Pepo Vidal o Alfredo Ott debe ayudar a crecer a otros más inexpertos como Dani Stefanuto o Nedzad Muratovic.

Paso a paso y defensa a defensa, el equipo cobista debe ir asentándose en la competición. Con esfuerzo, pasión y una afición de diez se podrán cumplir los objetivos.

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