Smartphones a la carrera

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photo_camera Una mujer, sacando una foto con su móvil en la llegada de la San Martiño 2015.

Todo cambia con la presencia del 2.0, también una San Martiño que se hace cada año más interactiva

Los smartphones han cambiado radicalmente nuestra realidad. Y de rebote, también el San Martiño. Ayer, las pantallas de los teléfonos surgían como setas en cualquier punto al que uno dirigiese la mirada. Nunca la carrera popular de Ourense fue más 2.0, con sus tentáculos digitales surgiendo por todas partes.

Para empezar, en la web de La Región, que ofreció desde primera hora de la mañana un minuto a minuto con todo lo que iba sucediendo en la prueba popular. El desarrollo de la carrera, salpicado con fotos y pequeños vídeos de uno de los hitos del año en Ourense.

Pero ayer había más razones para no tener guardado el móvil en el bolsillo de los vaqueros. La web Championchipnorte.com ofreció un seguimiento interactivo de cómo iba la carrera, algo que agradecerieron los propios espectadores. Poder ver en qué puesto va tu cuñado desde la palma de la mano o en el set de Telemiño, que habitó una pantalla para poder ver el tracking en tiempo real.

Por supuesto, fotos, fotos y fotos. Ya en el calentamiento mientras sonaban temazos veraniegos como 'Follow the leader' (por momentos los aledaños de Os Remedios parecían una rave). También durante la carrera, y por supuesto los selfies victoriosos tras cruzar la meta.

Y claro, en el siglo XXI una imagen con tus colegas no es una imagen con tus colegas si no se comparte. Por whatsapp (ayer echaban humo) o en las redes sociales, en las que la San Martiño fue trending topic, dejando de paso una profunda huella digital.

"Una mañana muy divertida en la San Martiño", escribía a media tarde en Instagram Víctor Riobo, tercero en la prueba. Lo acompañaba con un mosaico de fotos, para dar más empaque. Twitter fue otro hervidero de imágenes, que se mezclaban con comentarios ingeniosos, tuits de runners luciendo el tiempo empleado durante la prueba y orgullo, mucho orgullo. Porque #SanMartiño mola mucho.

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