PRIMERA AUTONÓMICA

El Verín recupera la autoestima 
y gana sin apuros

photo_camera Los verineses Diego Soto y Fran presionan al defensa del Ramirás Sierra. (MARTIÑO PINAL)

El Ramirás encaja la quinta derrota consecutiva, que lo deja en una situación muy comprometida en la tabla. 

Ramirás y Verín libraron una batalla desigual de la que salió mucho mejor parado el equipo de Iván González, que consiguió una inobjetable victoria que lo mantiene como tercer clasificado y potencia sus opciones a ocupar plaza de ascenso a la Preferente autonómica.

El cuadro local, que por su delicada posición en la tabla quería acabar con la sequía de triunfos, salió descaradamente a plantarle cara a los verineneses, pero en el primer fallo Fran robó un balón, realizó una rápida combinación que lo dejó cara a cara con el portero, que no pudo impedir su remate cruzado. Era el 0-1.

El Ramirás buscó la manera de inquietar, pero su arsenal ofensivo quedó reducido a un cabezazo ligeramente desviado de Cheikh.

Cada vez que Fran arrancaba con el balón en sus pies la posibilidad de aumentar la ventaja se acrecentaba. Un desborde de Pablo Roca por la derecha y su posterior centro que Diego Soto entrando de frente cabeceó desviado. Y sobre el cierre del primer acto, una incursión de Fran pudo acabar en gol, pero ante la salida de Kevin su disparo se fue pegado a un palo.

Los locales jamás le perdieron la cara al encuentro porque Chaky empujaba, Germán se multiplicaba y Cheikh incordiaba a los centrales. Pero con eso sólo no alcanzaba y en una nueva oportunidad que dispuso el Verín, el central Xurxo cabeceó con precisión un centro desde la izquierda que no pudo desviar el portero y que terminó colándose por el palo izquierdo. Con el 0-2, el pescado estaba vendido y las opciones del Ramirás se acabaron definitivamente cuando encajó el tercer gol.

El Verín mantuvo una gran intensidad en su juego y prueba de ello fue un nuevo desborde de Fran y su envío lo cabeceó Pablo García en el segundo palo hacia el corazón del área para que Luisito resolviera con un tiro raso.


Desazón

Al final, y a pesar de su desazón, el Ramirás acabó comprendiendo que ésta no era su liga y que la primera solución pasa por ganarle al Barbadás B. En la acera de enfrente, el Verín volvió a sonreir y sigue soñando.
 

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