El Barrocás sigue muy vivo en la pelea por la permanencia en la segunda categoría nacional de hockey hierba. Sufrió hasta el último segundo, pero encontró premio a un partido en el que había sido superior a los "puntos", pero que estuvo cerca de dejarlo en una situación crítica.
Un gol de Xurxo Cid en el último minuto desató la euforia en Mariñamansa y saca de la zona de descenso a los "naranjas".
Quedan dos jornadas y los ourensanos se jugarán su plaza en dos partidos consecutivos lejos de casa, pero la despedida de Mariñamansa no pudo ser mejor. Un partidazo con intensidad, ocasiones y mucha emoción.
Buen inicio local
Los de Roberto Oliveira trataron de llevar el peso de un partido que por momentos también estuvo condicionado por la lluvia, que fue haciendo cada vez más lento el juego.
Tras el tanteo del primer cuarto, el Barrocás se adelantó en el marcador al inicio del segundo. Xurxo recuperó una bola y forzó un penalti stroke que él mismo transformó (1-0).
El partido se tranquilizó y por momentos pareció controlado, pero en el último instante los visitantes encontraron un premio excesivo. Ortiz no perdonó una bola suelta y resolvió con potencia a la red de Dylan (1-1).
Gol agónico
El partido se complicó mucho para un Barrocás al que no le servía el empate. Tuvo ocasiones, pero también se notaban los nervios en un partido tan importante y cuando se barruntaba el castigo llegó el "milagro".
Con el reloj marcando la hora, Xurxo buscó un penalti córner que no encontró, el equipo visitante no supo sacar la bola de su campo y le acabó llegando de nuevo a Xurxo, que clavó la bola en la escuadra con un golazo que puede valer una temporada.
La próxima semana otro final, toca visitar al colista Complutense.