El 2020 que esta semana termina comenzó con múltiples éxitos para el deporte español: campeonas europeas en waterpolo, campeones europeos en balonmano, Carlos Sainz dominando el mal llamado Dakar, la ourensana Támara Echegoyen campeona de vela...
Entonces, un mal día de marzo, la crisis desencadenada por el Covid-19 surgida en China -quien ni ofrece explicaciones ni se las piden- provocó el mayor parón deportivo desde la II Guerra Mundial.
Las consecuencias económicas han sido devastadoras para el sector. El aplazamiento de los Juegos de Tokio 2020, la de mayor repercusión. Algunas modalidades pudieron adaptarse y desarrollarse.
Nadal y Sainz, otro año más
No pasa el tiempo por ellos. Y si pasa, los mejora como a los mejores vinos. Rafa Nadal ganó su decimotercer Roland Garros y Carlos Sainz el mal llamado rally Dakar.
Ellos fueron, una vez más, abanderados del deporte español en el año del Covid. Junto al pujante motorista Joar Mir, al Sevilla ganador de la Europa League o al Barça de la copa de Europa de fútbol sala. Buenas noticias también fueron los regresos de Fernando Alonso y del atleta Bruno Hortelano.
Muchos deportistas tendrán que reajustar y adaptarse al nuevo calendario que impone el cambio de los Juegos. Paciencia, resiliencia e ilusión. Pronto volveremos a disfrutar del deporte como hicimos antes.
El espectáculo debe continuar
Tras la alarma, la mayor parte de competiciones y deportes decidieron suspenderse hasta un mejor momento. A excepción de países como Bielorrusia, donde el presidente Lukashenko propuso el vodka como vacuna infalible.
Sólo algunas competiciones de enorme poder económico -NBA y Liga de Campeones- o modalidades desarrolladas al aire libre -el ciclismo y el motor- mantuvieron su actividad con más o menos restricciones o retrasos sobre el calendario previsto.
En todos ellos se obligó a suprimir un elemento clave, la presencia del público en las gradas, ahora limitada a ser espectadores a través de una pantalla. Fue la única solución para mantener el espectáculo.
Las crisis que se avecinan
La pandemia afectó económicamente a las competiciones más fuertes y dejó moribundas a las que vivían del cuento. Pronto veremos sus resultados. Ojo al fútbol español.
¿Alguién recuerda que fue el 'black lives matter'? Aquel movimiento de protesta, casualmente previo a las elecciones en Estados Unidos, reavivado y apagado a conveniencia por determinados sectores.
En el deporte, se asoció a un supuesto racismo o machismo. Falso en todas sus teorías. Nadie impide a Lebron James o Lewis Hamilton ganar en igualdad de medios y oportunidades. Nada impide a un millonario negro o a una mujer comprar un club deportivo. Fue una monumental tomadura de pelo.
Maradona y Kobe Bryant, al olimpo
El futbolista argentino Diego Armando Maradona y el jugador de baloncesto estadounidense Kobe Bryant ascendieron al olimpo de los dioses deportivos demasiado pronto y por sucesos traumáticos que tuvieron repercusión internacional. Fueron los deportistas más conocidos fallecidos en 2020. También nos dejaron, algunos de ellos afectados por el Covid, el piloto británico Stirling Moss, el marchador español Jordi Llopart, el laureado jugador y entrenador NBA K.C.Jones, el futbolista argentino 'Trinche' Carlovich -leyenda sin apenas apoyo gráfico- el entrenador serbio Radomir Antic, el fabuloso atleta estadounidense Bobby Morrow. También futbolista y después periodista, el inolvidable Michael Robinson. No fue deportista, pero sí un genio en el concepto de espectáculo y negocio, el tantos años comisionado de la NBA, David Stern. A todos ellos, gracias por hacernos vivir tan mágicos momentos.
Bailar ante la pantalla
La pandemia encerró a millones de personas durante una temporada en sus casas. El sueño de cualquier plataforma digital o cadena de televisión. En esta situación, la emisión de la serie documental de 10 capítulos sobre uno de los mejores equipos de todos los tiempos, el Chicago Bulls de Michael Jordan, fue un éxito arrollador. 'El último baile' se centra en las singulares personalidades de unos jugadores excepcionales, sus relaciones mientras hacían historia del baloncesto. Cada capítulo generó una enorme controversia y debate.
