El chileno Fernando González, quinto cabeza de serie del Trofeo Conde de Godó, despidió del torneo al segundo favorito, el español Fernando Verdasco (6-3, 4-6 y 6-4), en dos horas y 17 minutos de partido, y se medirá al también español David Ferrer en semifinales.
González entró en la pista central del RCT Barcelona como un vendaval, y rápidamente su puso 4-0 arriba. Cuando Verdasco reaccionó, ya era demasiado tarde (6-3).
En las dos mangas siguientes, el español y el chileno brindaron un partido eléctrico -más propio de pista rápida que de tierra-, igualado y repleto de intensidad.
González parecía que iba a cerrar el duelo en dos mangas, cuando se puso 4-3 a favor y servicio, pero entonces apareció el mejor Verdasco, pletórico de confianza desde que se convirtió en el héroe español de la última Copa Davis y aupado hasta su condición de séptimo jugador del ránking mundial.
El madrileño, regresó de su asiento en el descanso del 4-3 dispuesto a dar la vuelta al partido. Encadenó varios golpes ganadores de mérito, levantó al público de la pista central, no paró de animarse, puño en alto, y sumó tres juegos consecutivos -incluidas dos rupturas- para llevarse el segundo parcial (4-6).
La igualada prosiguió en los seis primeros juegos del tercer set, hasta que González volvió a romper el partido con un nuevo 'break' para ponerse otra vez 4-3 y saque. Pero el guión de la segunda manga no se repetiría en esta ocasión.
El de Santiago, más sólido que su oponente en la recta final del choque, templó los nervios, repartió varios palos desde el fondo a los que Verdasco no pudo llegar, y logró finiquitar el encuentro con su saque para sumar el 6-4 definitivo.
En las dos mangas siguientes, el español y el chileno brindaron un partido eléctrico -más propio de pista rápida que de tierra-, igualado y repleto de intensidad.
González parecía que iba a cerrar el duelo en dos mangas, cuando se puso 4-3 a favor y servicio, pero entonces apareció el mejor Verdasco, pletórico de confianza desde que se convirtió en el héroe español de la última Copa Davis y aupado hasta su condición de séptimo jugador del ránking mundial.
El madrileño, regresó de su asiento en el descanso del 4-3 dispuesto a dar la vuelta al partido. Encadenó varios golpes ganadores de mérito, levantó al público de la pista central, no paró de animarse, puño en alto, y sumó tres juegos consecutivos -incluidas dos rupturas- para llevarse el segundo parcial (4-6).
La igualada prosiguió en los seis primeros juegos del tercer set, hasta que González volvió a romper el partido con un nuevo 'break' para ponerse otra vez 4-3 y saque. Pero el guión de la segunda manga no se repetiría en esta ocasión.
El de Santiago, más sólido que su oponente en la recta final del choque, templó los nervios, repartió varios palos desde el fondo a los que Verdasco no pudo llegar, y logró finiquitar el encuentro con su saque para sumar el 6-4 definitivo.
