El diario luso 'A Bola' situaba al portero español en el epicentro de la derrota (1-0) después de un fallo individual en el partido que enfrentaba al Oporto contra el Guimaraes
Deporte general
Se acabó la tregua de Iker
Después de 16 temporadas en el Real Madrid, el 12 de julio de 2015 el portero español Iker Casillas cerraba el caeqpítulo que le vinculaba al uipo blanco y empezó una nueva página en su vida futbolística en el estadio de O Dragao a las órdenes de Julen Lopetegui.
Un paraíso, o al menos esa la idea que catapultó al guardameta a irse para Portugal. La temporada empezó con buenas sensaciones para el cancerbero con actuaciones memorables. La visita del Chelsea de Mourinho al estado de O Dragao fue un espejismo de la mejor forma del español. El equipo luso logró derrotar a los ingleses por 2-1. Tres paradas de mérito que hicieron al Porto colocarse líder en su grupo de Champions League. Sin embargo, el gol de William por su palo ensombreció la actuación del español.
La oportunidad de pasar de ronda para los lusos era ganarle al Dinamo Kiev en su propio estado, delante de su afición. El Oporto salió intenso, pero un penalti del defensa holandés del Oporto Martins Indi provocó que los ucranianos se adelantaran en la primera parte. En la segunda, con los lusos asediando la portería rival Casillas realizó un mal despeje que se coló en su portería, difuminando las esperanzas locales. Tenían que jugarse el pase en Stamford Bridge contra el Chelsea. El equipo de José Mourinho ganó 2-0 y los lusos se despidieron de la Champions.
Con la marcha de Julen Lopetegui después de perder el clásico contra el Sporting de Portugal y la eliminación de la Champions, Rui Barros se hizo cargo del equipo de forma momentánea hasta que la directiva encuentre sustituto. El español, titular indiscutible, desbordó el vaso con la última 'pifia' en su visita al Guimaraes. Cuatro minutos de partido sirvieron para que los locales metieran el único gol del partido tras un error del exmadridista:
El diario deportivo A Bola escenificaba el error del español en su portada con el titular: "Manos de mantequilla". Una declaración de intenciones que dejaba a cinco puntos del líder el Porto.
El fallo corrió por las redes sociales como la espumo y la derrota escoció al portero español que incluso contestó algún tweet de forma irónica.
