Eusebio se juega el puesto y el Celta la vida esta tarde (18:00, TVG) ante el Cádiz, un rival directo por la permanencia

El muerto quiere resucitar

Michu y Trashorras, trotando ayer sobre el césped de A Madroa, ambos serán titulares hoy. Foto: j.v. landín
La de entrenador de fútbol tal vez sea la profesión más envidiada en este país. Todos tenemos uno dentro, o eso dicen, y todos sabríamos qué hacer si nos tocara sentarnos en el banquillo, o eso decimos. Pero créanme, no me gustaría estar hoy en la piel de Eusebio Sacristán. Y por varios motivos.
El primero, y más evidente, es que se juega el puesto. La directiva le ha puesto un ultimátum sobre la mesa y si el partido ante el Cádiz no se resuelve con una victoria puede ir haciendo las maletas, a no ser que el presidente, recién llegado de México, decida indultarlo a última hora. Pero su futuro profesional no es lo único que inquieta a Eusebio. El entrenador vallisoletano es una persona honesta y bienintencionada y sabe que, al margen de su situación personal, el Celta se juega la vida en este partido. ¿Por qué? Porque éste es de los encuentros que marcan tendencia. Perder ante el Cádiz podría significar volver a los puestos de descenso muchos meses después y daría vida al conjunto gaditano, que asomaría la cabeza, rebasaría al Celta en la tabla y, además, le ganaría el 'golaverage'. Un auténtico estropicio y un golpe moral que difícilmente podrá asumir una plantilla con un ánimo tan frágil como la celeste. Otro motivo, y nada desdeñable, por el que la situación de Eusebio no es envidiable es el caos que se vive en el vestuario, al que él no ha sabido poner freno. El técnico ha actuado de pirómano en los últimos días. Suponemos que inconscientemente, ha echado gasolina a la hoguera y las llamas amenazan con reducir a cenizas la unidad del vestuario. Primero dijo que algunos jugadores habían bajado los brazos en Villarreal, luego señaló a los canteranos y, ayer, se limitó a cargarle el 'muerto' a Joselu dejándolo fuera de la lista. No debe resultar fácil gestionar una plantilla de un equipo profesional, pero han de reconocer que Eusebio no estuvo muy hábil esta semana. Dejando a un lado los líos que han salpicado al equipo en los últimos días, resulta bastante complicado adelantar un once y ofrecer plenas garantías de que ése será el que disponga Eusebio. El técnico ha probado un puñado de variantes en ataque durante la semana. Ayer mismo se decantó por el delantero del filial Oriol Riera en el teórico equipo titular. Esta opción, en teoría arriesgada, parece que es la que más convence al entrenador. Ésta no será la única novedad en el once. Es probable que vuelvan al equipo otros cuatro jugadores: Falcón, Vasco, Michu y Bustos. ¿Cómo se resucita a un muerto? He de reconocer que desconozco el procedimiento. Esperemos que Eusebio, por su bien y por el del Celta, sí fuese ese día a clase.

Te puede interesar