El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), el belga Jacques Rogge, dijo hoy estar contra los 'boicots' porque 'no sirven para nada' y criticó la actitud de ciertos líderes europeos que anunciaron su intención de no ir a la Eurocopa de fútbol en Ucrania.
Rogge aseguró en una entrevista al vespertino 'Le Monde' que el boicot de ciertos dirigentes europeos, en señal de protesta por el encarcelamiento de la ex primera ministra, Yulia Timoshenko, no impedirá que triunfe esa competición que comienza mañana.
No quiso, sin embargo, pronunciarse sobre si los gobiernos occidentales deberían asistir a ese campeonato europeo, ya que, consideró que no le corresponde a él tomar esa decisión sino a los dirigentes de cada país.
El nuevo presidente francés, el socialista François Hollande, es una de las personalidades que anunció que no piensa viajar a Ucrania.
En declaraciones al vespertino 'Le Monde', el presidente del COI se mostró convencido de que el poder de esas acciones de presión 'es muy limitado'.
Los Juegos Olímpicos de Moscú, en 1980, fueron un éxito, pese al boicot promovido por los gobiernos occidentales en protesta contra la invasión de la entonces Unión Soviética (URSS) a Afganistán, recordó.
Rogge, que inició su mandato en 2001 y lo finalizará en 2013, estimó que las únicas víctimas de un boicot son los atletas.
'No hay que exigirle al deporte lo que las Naciones Unidas no consiguen', pues el juego puede transmitir un mensaje de paz, pero no evitar la guerra y los conflictos, agregó.
Respecto a la participación siria en los Juegos Olímpicos de Londres, Rogge dijo no tener noticia alguna de que los atletas sirios no quieran participar en ese evento, para no tener que representar al régimen de Bachar Al-Assad.
Al contrario, precisó que los deportistas de alto nivel con quienes el COI está en contacto 'quieren ir a los Juegos e irán' y aseguró que 'su libertad de expresión está garantizada'.
También se mostró dispuesto a dialogar con Qatar, Arabia Saudí y Brunei, para que permitan que sus equipos estén integrados por mujeres.
No quiso, sin embargo, pronunciarse sobre si los gobiernos occidentales deberían asistir a ese campeonato europeo, ya que, consideró que no le corresponde a él tomar esa decisión sino a los dirigentes de cada país.
El nuevo presidente francés, el socialista François Hollande, es una de las personalidades que anunció que no piensa viajar a Ucrania.
En declaraciones al vespertino 'Le Monde', el presidente del COI se mostró convencido de que el poder de esas acciones de presión 'es muy limitado'.
Los Juegos Olímpicos de Moscú, en 1980, fueron un éxito, pese al boicot promovido por los gobiernos occidentales en protesta contra la invasión de la entonces Unión Soviética (URSS) a Afganistán, recordó.
Rogge, que inició su mandato en 2001 y lo finalizará en 2013, estimó que las únicas víctimas de un boicot son los atletas.
'No hay que exigirle al deporte lo que las Naciones Unidas no consiguen', pues el juego puede transmitir un mensaje de paz, pero no evitar la guerra y los conflictos, agregó.
Respecto a la participación siria en los Juegos Olímpicos de Londres, Rogge dijo no tener noticia alguna de que los atletas sirios no quieran participar en ese evento, para no tener que representar al régimen de Bachar Al-Assad.
Al contrario, precisó que los deportistas de alto nivel con quienes el COI está en contacto 'quieren ir a los Juegos e irán' y aseguró que 'su libertad de expresión está garantizada'.
También se mostró dispuesto a dialogar con Qatar, Arabia Saudí y Brunei, para que permitan que sus equipos estén integrados por mujeres.
