El expresidente del Gobierno Felipe González expresó ayer sus discrepancias con el Ejecutivo de que la alianza entre Sacyr y Pemex en Repsol sea meramente una 'operación empresarial', porque no se cree la tesis de que se va a garantizar 'la españolidad' de la petrolera.
'Mi opinión como ciudadano es que no me gusta', aseveró el veterano político en una entrevista con la Cadena Ser, al ser preguntado por el anuncio de la constructora española y la petrolera mexicana de que votarán conjuntamente en las decisiones que afecten a Repsol.
En cuanto a lo esgrimido por el Gobierno, insistió en que no se cree lo que se argumentó para no intervenir ante la operación. '¿Es una broma, no?', ironizó. 'El argumento que se ha dado no me gusta porque no me lo creo y no es correcta la apreciación que se ha hecho', esgrimió, al tiempo que aclaró que la petrolera Pemex tendrá como prioridad 'defender los intereses mexicanos' y no la españolidad de Repsol.
Al expresidente le 'asombra ver' que la Comisión Nacional de la Energía diga que 'aquí no hay nada que revisar' cuando argumenta que esta operación no afecta a la seguridad de suministro de España, pese a que Repsol tiene participación en el mercado regulado de este país, a través del desarrollo nuclear y gasístico, por lo que le parece una incoherencia esa postura.
Al respecto, el expresidente se pronunció en los siguientes terminos: 'Si después del análisis la Comisión dictamina 'a', 'b' o 'c', vale, pero previamente no lo entiendo. Lo entiendo muy bien y no me gusta' sentenció.
En cuanto a lo esgrimido por el Gobierno, insistió en que no se cree lo que se argumentó para no intervenir ante la operación. '¿Es una broma, no?', ironizó. 'El argumento que se ha dado no me gusta porque no me lo creo y no es correcta la apreciación que se ha hecho', esgrimió, al tiempo que aclaró que la petrolera Pemex tendrá como prioridad 'defender los intereses mexicanos' y no la españolidad de Repsol.
Al expresidente le 'asombra ver' que la Comisión Nacional de la Energía diga que 'aquí no hay nada que revisar' cuando argumenta que esta operación no afecta a la seguridad de suministro de España, pese a que Repsol tiene participación en el mercado regulado de este país, a través del desarrollo nuclear y gasístico, por lo que le parece una incoherencia esa postura.
Al respecto, el expresidente se pronunció en los siguientes terminos: 'Si después del análisis la Comisión dictamina 'a', 'b' o 'c', vale, pero previamente no lo entiendo. Lo entiendo muy bien y no me gusta' sentenció.
