El Ibex 35 se ha precipitado un 3,31% al cierre de mercado, su cuarta mayor caída del año, con lo que ha perdido la cota de los 6.500 puntos por primera vez desde el pasado 29 de mayo de 2003.
El riesgo a una salida del euro de Grecia y el 'pinchazo' en las expectativas sobre la cumbre europea también han presionado la prima de riesgo española, que escalaba a los 483 puntos básicos.
En la gran banca, y a pesar de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, reafirmó que los bancos españoles no necesitan acudir 'a fecha de hoy' al fondo de rescate de la UE, BBVA y Santander se desplomaron un 4,05% y un 3,01%, respectivamente.
Telefónica cedió un 4,9% y se anotó la sexta mayor caída de la sesión, en tanto que Repsol perdió un 3,09%. Los mayores recortes los protagonizaron Sacyr (-10,60%), FCC (-8,36%) y Abengoa (-6,19%).
Bankia se desmarcó de los desplomes en el selectivo y se dejó un 1,4%, en la víspera de que el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, detalle los planes de saneamiento de la entidad en una comparecencia en el Congreso de los Diputados.
Con todos sus valores en rojo, el índice ahondó en sus cotas mínimas de hace nueve años y marcó un nuevo mínimo anual, que estableció en 6.440,5 puntos.
Aun así, la caída del Ibex no fue una excepción en Europa, pues las pérdidas superaron el 2% entre los grandes parqués, mientras en Milán se ampliaron al 3,7%.
Tampoco al otro lado del Atlántico la jornada se iniciaba con optimismo. Wall Street se anotaba pérdidas superiores al 1% en las primeras horas de la sesión ante la corrección en las Bolsas europeas.
PRESIÓN SOBRE LA DEUDA Y EL EURO.
La presión de los inversores se dejó sentir también en el mercado de deuda pública. La prima de riesgo española volvía a tensionarse y escalaba a los 483 puntos. La rentabilidad del bono español a 10 años se situaba en el 6,219%.
Con todo, los rumores sobre una eventual salida de Grecia del euro llevan a la moneda única a perder posiciones respecto al dólar, al intercambiase al cierre de mercado por debajo de la cota de los 1,26 'billetes verdes'. El euro se establecía así en su nivel más bajo desde julio de 2010.
En la gran banca, y a pesar de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, reafirmó que los bancos españoles no necesitan acudir 'a fecha de hoy' al fondo de rescate de la UE, BBVA y Santander se desplomaron un 4,05% y un 3,01%, respectivamente.
Telefónica cedió un 4,9% y se anotó la sexta mayor caída de la sesión, en tanto que Repsol perdió un 3,09%. Los mayores recortes los protagonizaron Sacyr (-10,60%), FCC (-8,36%) y Abengoa (-6,19%).
Bankia se desmarcó de los desplomes en el selectivo y se dejó un 1,4%, en la víspera de que el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, detalle los planes de saneamiento de la entidad en una comparecencia en el Congreso de los Diputados.
Con todos sus valores en rojo, el índice ahondó en sus cotas mínimas de hace nueve años y marcó un nuevo mínimo anual, que estableció en 6.440,5 puntos.
Aun así, la caída del Ibex no fue una excepción en Europa, pues las pérdidas superaron el 2% entre los grandes parqués, mientras en Milán se ampliaron al 3,7%.
Tampoco al otro lado del Atlántico la jornada se iniciaba con optimismo. Wall Street se anotaba pérdidas superiores al 1% en las primeras horas de la sesión ante la corrección en las Bolsas europeas.
PRESIÓN SOBRE LA DEUDA Y EL EURO.
La presión de los inversores se dejó sentir también en el mercado de deuda pública. La prima de riesgo española volvía a tensionarse y escalaba a los 483 puntos. La rentabilidad del bono español a 10 años se situaba en el 6,219%.
Con todo, los rumores sobre una eventual salida de Grecia del euro llevan a la moneda única a perder posiciones respecto al dólar, al intercambiase al cierre de mercado por debajo de la cota de los 1,26 'billetes verdes'. El euro se establecía así en su nivel más bajo desde julio de 2010.
