Nuevas empresas basadas en nuevos conceptos

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No todo son malas noticias lo que viene a partir de estos años de depresión económica, pues toda crisis es el principio de un cambio, por pequeño que sea, y aunque ante las adversidades es difícil ver ese punto positivo no está de más recordar que existe.
Entre otros una buena muestra es la solidificación de las bases de nuevas formas de asociación entre ciudadanos, como el consorcio de emergencias creado ya el año pasado por las provincias de Ourense, Pontevedra y Portugal.

El objetivo de tal es organizar a los voluntarios de Protección Civil, las asociaciones y agrupaciones locales mejorando así la actuación de éstos en casos de emergencia.

Y ésta es solo una muestra más cercana de las últimas organizaciones en las que se opta por un sistema cooperativo más cercano al de intercambio, una especie quizás de avance a un sistema económico diferente.

Nuevas formas de ofrecer servicios de las que ya son pioneras de una forma menos obvia plataformas en internet donde pueden encontrarse REUNIDAS OFERTAS en diferentes tipos de servicios o productos que quizás resultarían fuera del alcance para muchos bolsillos, pero que gracias a estas alternativas se hacen más accesibles.

Si hay algo que fue enseñado a la mayoría de este país desde la infancia es que no todo puede tenerse y lo que parece que se está aprendiendo es que pueden tenerse muchas más cosas de las que en un principio se pensaría posible si se busca la forma de conseguirlo.

En esta idea es en la que crean raíces ideas como las de GROUPON, que a pesar de las dificultades se abren paso porque ofrecen algo en lo que no se había pensado antes, pues optar por un comercio tradicional en estos momentos es una idea poco recomendable, de difícil sostenibilidad y supervivencia.

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